Speak Now (EXO's Version)

Enchanted ― SeHo

Ahí estaba yo otra vez esta noche

Forzando risas, fingiendo sonrisas

El mismo lugar aburrido y solitario

Los muros de insinceridad

Las miradas evasivas y el espacio vacío

Desaparecieron cuando vi tu rostro

Todo lo que puedo decir es que fue encantador conocerte

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SeHun está serio, parado en una esquina del gran salón.

Es un príncipe en una gala.

La ceremonia no es extravagante, es aburrida. Ha asistido a centenares de fiestas iguales en la semana. Lo único que quiere es echarse en su cama y dormir... Para siempre. Bueno, tal vez exagera un poco. Pero sin duda alguna prefiere estar en su casa que en otro baile lleno de príncipes cretinos y princesas que fingen ser damiselas en apuros.

Si él adoptara el papel de damisela en apuros, ¿uno de esos jodidos príncipes bien envueltos en sus ternos acudiría a su rescate?

La verdad es que es gay.

Solo lo sabe su padre... Porque se lo gritó a la cara, exasperado, luego de que su progenitor trajera al castillo a otra princesa para... unirse, en todos los sentidos de la palabra.

SeHun sabe que su linaje terminará con él, su padre lo odiará y su pueblo querrá quemarlo vivo.

La situación es demasiado compleja y SeHun no tiene ánimos de pasar el resto de la noche pensando en el futuro desolador que le espera. Gruñe y camina con pasos pesados hacia una de las salidas que da a un balcón. Se va a la más lejana y solitaria, a aquella en la que no llegan ni los amantes listos para darse un buen sacudón (y no bailando).

Mientras camina, un rostro llama su atención. Es un joven bajito, blanco, pelinegro y tiene un aura que hace que SeHun quiera vomitar, ¡parece el principito perfecto! SeHun lo odia y ni siquiera lo conoce, pero luce como la clase de persona que quiere agradarle a todo el mundo a como dé lugar. Justo la clase de persona que él detesta.

Llega al balcón y cierra la cortina para que las personas lo tomen como una señal de "ocupado".

SeHun apoya sus brazos en el balcón e inclina su cuerpo. Observa el inmenso jardín bien decorado y podado. Ni la naturaleza consigue tranquilizarlo. La noche se ve hermosa. Es una lástima que él siga pensando en las palabras de su padre.

―¡Me da igual quién te guste, pero debes casarte y tener hijos! Así es como debe ser. Podemos arreglar un compromiso confidencial con las cláusulas que creas necesarias, pero sí o sí debe haber heredero. Por ello, seguirás asistiendo a todos esos bailes que odias. ¡Escoge a una mujer! Todas las que escojo para ti, las ahuyentas.

―No escogeré a ninguna mujer, padre.

―Entonces, irás para siempre a los bailes.

Eso era una sentencia de muerte. ¡Ir por siempre a los bailes! SeHun prefería irse a vivir con los lobos. Aunque por ahí corren las leyendas de que hay seres mitad humanos y mitad lobos. SeHun hasta preferiría coger con un hombre lobo a tener que fingir sentimientos por una mujer. No odia a las mujeres, ¡no le atraen! Y tampoco quiere mentirles descaradamente. Y decirles la verdad podría ser peligroso, los rumores se expanderían como pólvora.