CAPITULO 1

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En el bosque, Danna vivía sola en una cabaña. Fue criada en el campo por

una pareja de omegas que la encontraron un día flotando en el río, dentro de

una cesta. Sus padres murieron cuando ella tenía 18 años; su padre falleció

mientras apoyaba al alfa Orfeo en una batalla para proteger las tierras del

territorio sur, y su madre, al no tener a su compañero, murió de tristeza.

Danna aprendió a sustentarse por sí misma: cosechaba y cazaba su propia

comida y, a veces, intercambiaba o vendía sus productos dentro de la

manada.

Un día, fue al pueblo en busca de provisiones. Ese día la gente estaba

alborotada y la plaza se entraba full de personas debido a la coronación del

nuevo alfa de alfas. Ella, curiosa, decidió quedarse para observar el acto.

El consejo de ancianos y alfas de otras manadas estaban sentados esperando

al nuevo alfa de alfa. Eros hacía 6 meses que había asumido su puesto de alfa

de la manada azul tras el fallecimiento de su padre en una batalla por

defender las tierras del sur de Alaska.

Por elección de los viejos lobos de las manadas, Eros fue nombrado alfa de

alfas debido a que, al igual que su padre, era un guerrero luchador y

estratega en las batallas. Además, tenía estudios académicos en la mejor

universidad de Estados Unidos y regresó a la manada después de la muerte

de su padre.

Eros hablaba al pueblo sobre sus deberes en la manada y en la región,

cuando un olor exquisito entró desesperadamente por sus fosas nasales. Su

lobo, Hércules, estaba descontrolado murmurando.

-¡ Es mi mate!

Ėl buscaba la procedencia del aroma hasta que vio a Danna. Ella también

estaba igual y sus miradas se encontraron. Danna se emocionó al observar al

hombre alto y fuerte, de ojos azules; su porte era imponente, y su loba Hedé

estaba inquieta. Eros se sumergió en esos ojos místicos por unos segundos,

luego arrugó la cara y se sintió molesto al observar el aspecto de su mate

con ese cabello negro azulado desaliñado. Llamó a uno de sus hombres de

seguridad.

Danna se dio cuenta de cómo la miraba con desprecio, y allí su emoción

desapareció. Salió corriendo, apartando a la gente de su camino, corrió por

las calles hacia el bosque donde liberaría a Hedé, pero fue interceptada por

tres guerreros que la atraparon.

-¡ Suéltenme!, por favor, ¿quiénes son ustedes? -gritó desesperada.

-Cálmese, señorita, vamos a la mansión de Eros. Él pronto estará hablando

con usted.

Danna fue montada a la fuerza en la parte de atrás de un carro y llevada a la

DANNA, La Alfa Reina De Los Lobos Sin HumanidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora