Capítulo 5. ¿Debo robarme a la novia?

9.3K 940 213
                                    

Cuando pronuncié aquellas palabras, el salón entero estalló en murmullos, Jisoo se levantó rápidamente de su asiento y vino corriendo hacia mí. La rubia que supuse, era Rosé, caminó detrás de ella al notar que me conocía, al ver su rostro, no había ni una pizca de amabilidad, todo en ella gritaba violencia. Jisoo llegó y se colocó frente a mí, como queriéndome proteger de lo que se venía.

-¿Estás bien?- preguntó volteando ligeramente su cabeza, solo pude aferrarme a sus hombros y asentir, necesité de todo mi valor para cruzar es puerta como lo hice y confesarme ante el escrutinio público, ahora no sabía que hacer, si no fuera por Jisoo, ya me hubiera derrumbado.

–¿Qué estás diciendo Jennie, eres una loca? Yo no soy el padre de ese niño. Eso es mentira– volteó hacia su pareja– no es cierto amor, no le creas, esa está obsesionada conmigo, quiere destruir este matrimonio antes de que empiece, es una loca– Lisa volteó a verme nuevamente, como escaneandome, para decidir si creerme o no, regresó su mirada,ahora hacia un Ha Yoon arrodillado suplicando clemencia.

–No mientas– soltó sus manos de un jalón– ¿piensas que me puedes ver la cara de estúpida?

Unos gritos masculinos interrumpieron la interacción, era el papá de Lalisa.

-¿Con que la cuidarías con tu vida? Eres un poco hombre- Lo levanto de las solapas del sacó y solo ví como su brazo se levantaba rápidamente y se estrellaba contra la mejilla de Ha Yoon, casi noqueandolo, vaya fuerza tiene el viejo y casi de inmediato vino una cachetada por parte de su esposa. Qué genial.

Ha Yoon habló, más bien, me gritó.

–Diles Jennie, diles que lo que estás diciendo es una mentira, ¡no puedes arruinar mi vida así!

–No estoy diciendo mentiras, tu también me engañaste, me hiciste pensar que me amabas– respondí desahogándome con rencor, era poco en comparación a lo que sentía.

Su madre seguía tratando de hablar a sus invitados y calmarlos, después del primer golpe de Marco, todo se descontroló, las señoras solo hablaban casi a gritos indignadas, se alcanzaba a percibir entre los gritos “poco hombre” “mal nacido” “perro infiel”

Pero hubo uno en especial, que tuve que escuchar lamentablemente, “lárgate de aquí y llévate a tu perra contigo”, esto hizo reaccionar tanto a Jisoo como a Rosé, al parecer está última ya estaba al tanto de todo, ya no se podía sentir enojo de ella, al contrario, me sonreía con demasiada empatía. Ambas se colocaron frente a mí, yo no soy una perra, bueno, tal vez sí, una perra ilusa, pero no es a propósito, lo juro. Me afectó, pero disimulé muy bien para que ellas no lo vieran, qué culpa tenía yo si a mí también me habían engañado.

Por las personas que estaban levantadas, solo se veían a Ha Yoon y a Lalisa, este aún se estaba sobando la mejilla que le golpeó Marco, fue un buen guantazo, la chica aún seguía en shock, parecía tan perdida, solo miraba de un lado a otro esperando o buscando algo, ¿qué era? no lo sé, pero se veía tan indefensa que hacía que el sentimiento de querer protegerla saliera a chorros de mí.

Ni siquiera sentí cuándo me solté de Jisoo y salí de sus espaldas caminando al frente, solo fuí consciente de lo que estaba haciendo hasta que llegué a mi destino y pude ver mejor a esta mujer, Lalisa. ¡¿Qué mierda estaba haciendo?! No lo sé, me sentía atraída como un imán, mi yo racional ya estaba desmayada en el piso con lo que estaba planeando hacer, le sonreí, algo tímida, ella me sonrió de regreso, ahora solo estábamos enfocadas en las dos, dios, portaba una belleza tan imponente… dominante. Me sentía pequeña ahora que la tenía enfrente, viéndome a los ojos, habíamos creado una pequeña burbuja, me sentía bien, casi cálida, por un impulso salido de quién sabe dónde, extendí mi mano y tomé la suya. Me encantó el tacto de su piel contra la mía, su piel se sentía tan suave.

Paper Rings |Jenlisa| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora