Los pequeños traviesos jugaban en los jardines del palacio de Maldonia, mientras sus padres tomaban el té.
-¡Waylon necesitamos ver primero que papel tendrá cada quien!, ¡baja de ahí!-gritó el pequeño Alec.
-Tranquilo Lec, no hay nada que decidir yo seré el príncipe que rescatará a la princesa-.
-¿Y como porque tu siempre tienes que ser el heróico príncipe?-Comentó Marius.
-¿A caso vuelas?-.
-Yo vuelo-dijo su amigo peludo mientras aparecía.
-Si pero tu eres un gato Bas-.
-Bien tu sé el príncipe, Alec será tu ayudante, yo seré el villano, Tom y Tedd serán mis secuaces, Trevor el Hechicero y Bas el dragón-Mencionó el peliblanco-¿Todos Deacuerdo?-.
-Todos de Acuerdo-dijeron al unísono.
-Aún falta saber quien será la Princesa y quien la bruja-Comentó Sucy.
-Uy, ¿puedo ser yo la princesa esta vez?-Preguntó la pequeña Evangeline.
-No Lin, ya sabes que Lissie es la más bonita por lo tanto ella será la princesa y tu la bruja, yo tengo que estar con una princesa de mi altura, hermosa, pero no más hermosa que yo-.
Todos se quedaron sin habla, pues entre pequeños eran normales algunas bromas, pero Waylon había cruzado la línea. La emoción de la niña desapareció rápidamente, dejando a ver la tristeza en su rostro.
-Lin si quieres se tú la princesa-Animó la pequeña Clarisse.
-No, está bien, seré la bruja-.
La pequeña continuó con sus amigos el juego que habían planeado, pero algo dentro de ella comenzó a nacer. Jamás había sentido el rechazo por alguien de esa forma.
Mucho menos comenzar a pensar en que debía llenar una expectativa.
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Despues de terminar de jugar y tomar el té, la noche llegó al palacio, los reyes de Maldonia, se encontraban en la habitación de su pequeña hija, quien no queria dormirse hasta que su padre terminara de leer su libro favorito.
-Después de tocar la música que más amaba, con su mejor amigo, y de bailar horas y horas, con su ahora esposa, el rey sapo se dio cuenta, que repetiría una y mil veces la historia, para conocera, y principalmente ver a la mujer de sus sueños, cumplir los suyos-comentó su padre cerrando el libro en sus manos-Y enamorarse de ella, nuevamente, como la primera vez-.
-Otra vez, Otra vez, ¿Puedes?, ¿Puedes?, ¿Puedes?-suplicó.
-Lo siento Lucerito, pero ya es hora de domir-.
-Porfavor, amo escuchar esa historia-dijo la pequeña mientras tomaba su peluche de sapo para empezar a bailar entre giros por la habitación-me imagino logrando mis sueños, conociendo muchos amigos o besando a un sapo, que el me quiera tal y como soy, como en la historia-.
-No, nada de besar sapos hasta los 30-.
-Naveen, dejala soñar-.
-¡Es cierto!, mamá en poco tiempo se convirtió en tu sueño cuando eran jovenes-.
-¿Y tu cómo lo sabes?-.
-El tío Louis es mejor tocando la trompeta que guardando secretos-.
-¿A, si?, ¿Y que mas te dijo eh?-.
-Bueno, toda la historia del libro es cierta, muchas cosas se lograron gracias a la estrella Evangelin-Comentó la pequeña admirandola por la ventana.
-Por eso es que llevas su nombre tesoro, como recordatorio de que si lo sueñas, es posible-agregó el rey.
-¿Entonces se cumplirá todo lo que desee?-.
-Siempre y cuando creas en ti misma-dijo la reyna tomando el rostro de su hija entre sus manos-y trabajes mucho para lograrlo-mientras terminaba de arroparla.
-Ahora a dormir, mi pequeña Evangeline-.
Ambos dejaron un beso en la frente de su hija para luego apagar la pequeña luz de noche, salir y cerrar la puerta.
Pero Evangeline aún tenía algo por hacer.
Cuando escuchó a sus padres alejarse de su habitación tomó el libro entre sus pequeñas manos, abrió las cortinas y miró con emoción la portada. Cerró sus ojos mientras pegaba el libro a su pecho, cerca de su corazón y con todo el deseo del mundo miro con esperanza a la estrella.
-¿Puedes?, ¿Puedes?, ¿Puedeeees?-.
Admiró una última vez el dibujo de los dos reyes, antes de levantar la vista y ver a un pequeño sapo sobre el marco de su venta. La pequeña morena trató de alejar cuidadosamente al amigo verde, pero este croó haciendo que la pequeña se espantaste y saliera corriendo a la habitación de sus padres con el libro en sus manos.
Desde aquella noche, evangeline supo algo que jamás saldría de su mente y corazón.
Desear ser aceptada por quien es no bastaba, debería trabajar duro para que las personas que la conocieran, vieran qué valdría la pena estar cerca de ella.
Y así una pequeña fijo para siempre su más grande deseo.
A veces podemos malinterpretar el hecho de "trabajar duro", por cosas que pensamos que serán correctas como Evangeline, ¿no lo creen?.Espero puedan seguir disfrutando de la historia.
Aime Araceli ✨
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✨𝑬𝑽𝑨𝑵𝑮𝑬𝑳𝑰𝑵𝑬✨ - ᴅᴇꜱᴄᴇɴᴅɪᴇɴᴛᴇꜱ
Fanfic¸.•*'¨'*•.¸.•*'¨'*•.¸.•*'¨'*•.¸.•*'¨'*•.¸.•*'¨'* Los deseos a las estrellas son tan bellos como las personas que los piden. •────────•✨•────────• Evangeline es una chica muy soñadora, y sabe que si desea algo de corazón se cumplirá. Pero solo será g...