10. He looks just like a dream

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-¿Eh?... ¿Me llevarás cargando en tu espalda hasta nuestra habitación?

-Mjum... Ahora sube antes de que me arrepienta.

-Amm está bien.

Satoru se acercó un poco a Suguru y finalmente subió a su espalda mientras que Suguru tomó sus piernas sin lastimarlo para que no se cayera.

-Listo... Sujetate bien, no quiero que te caigas.

-De acuerdo.- Respondió Satoru un poco nervioso y abrazando por el cuello a Suguru para no caerse.

-Bueno vámonos.- Suguru comenzó a caminar rumbo a su habitación.

Suguru caminaba a un paso algo lento para evitar que Satoru se sintiera incómodo y para evitar que le pasará algo.

-Oye Suguru... Gracias por mmh... Llevarme en tu espalda.

-Descuida, no tienes que agradecer... Te veías cansado así que ésto es lo menos que puedo hacer por ti. No me gustaría que te pasara algo malo.- Dijo Suguru con un tono serio y continúo caminando.

Satoru sintió arder sus mejillas cuando escucho esas palabras por parte de Suguru e incluso esas palabras hicieron que su corazón latiera más rápido.

Después de haber caminado por unos minutos Suguru estaba más cerca de llegar a la zona en donde estaban todas las habitaciones.

Satoru bostezo suavemente; pareciera que en cualquier momento iba a cerrar sus ojos azules y caería en un sueño profundo.
No pasaron unos cuantos segundos y Satoru acercó su cara al oído de Suguru para susurrarle.

-Suguru~... Te quiero...- Dijo suavemente al oído de Suguru con un tono demasiado bajo. Recargó su cara en el hombro de Suguru y se quedó dormido.

Suguru sintió la respiración de Satoru muy cerca de su cuello y eso junto a lo que dijo antes hizo que ese calor que solía instalarse en su pecho cuando estaba con él apareciera una vez más y todo su rostro se volvió completamente rojo.

Suguru sabía muy bien que probablemente estaba sufriendo efectos del amor, pero como nunca antes se había enamorado de alguien en tampoco tiempo tenía la esperanza de que ese sentimiento fuera pasajero y dentro de unos cuantos días desapareciera, sin embargo Satoru no aportaba mucho. Sus actitudes, su forma de ser y su aspecto físico lo hacían más que atractivo para Suguru.

Suguru caminó y caminó hasta que por fin llegó a su habitación y recostó con delicadeza sobre la cama a Satoru para no despertarlo.

-Yo también te quiero Satoru...- Dijo casi susurrando y con una leve sonrisa.

Suguru se sentó sobre el suelo y se quedó pensando en que hacer; era algo temprano aún para dormir y se estaba aburriendo sin alguien con quién hablar.

Tres golpes en la puerta sacaron de sus pensamientos a Suguru.
Suguru se levantó y se dirigió a la puerta para abrirla. Cuando abrió la puerta se topó con Shoko que lo miraba molesta.

-¡¿Por qué tardas tanto en abrir?!- Dijo Shoko exagerando y entrando a la habitación sin siquiera preguntar.

-Pero no pasó ni siquiera un minuto de que abrí la puerta cuando tocaste... ¿Y podrías guardar silencio? Satoru está durmiendo.- Respondió Suguru haciendo una mueca.

-¿Gojo durmiendo tan temprano? Que raro y aún más raro es que te preocupes por él.

-No es eso... Solo que estaba demasiado cansado, así que decidí traerlo cargando hasta aquí.

I don't wanna be your friend, i wanna kiss your lips/SatoSugu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora