Un plan casi perfecto

11. ¡Beso, beso, beso!

Capítulo once

Julie

Cuando salgo del armario voy directo al baño, ignoro los gritos de Lucy llamándome o las risas de Sean y Alex cuando se dieron cuenta que algo había pasado.

Mierda, Chase me había devuelto el favor. Y si, con devuelto el favor me refiero a que me hizo sexo oral.

Me miro al espejo y no puedo evitar soltar un grito ahogado.

Estoy tan roja como uno lo puede estar y mi maquillaje está corrido. Me entristezco un poco porque me costó hacerme la línea del delineado.

Me lavo la cara retoco un poco mi maquillaje y vuelvo a la fiesta.

Ahora sí, necesito emborracharme urgente, tal vez así y solo así pueda olvidar lo que acaba de suceder. Aunque siendo honesta conmigo misma no sé si en verdad quiero olvidar.

Voy directo hacía las bebidas y me sirvo lo primero que veo que ni se qué es.

Me paso un rato bebiendo y charlando con algunos chicos del equipo de lacrosse, son muy divertidos.

Para mi cuarto vaso ya me encuentro achispada, no borracha pero sí en ese plan feliz.

Voy a servirme un quinto cuando noto como alguien me toma del brazo.

— ¿Hola? —saludó dándome vuelta.

Cuando giro me encuentro con Molly, la ex de Chase.

Frunzo el ceño confundida.

No estoy de humor para sociabilizar con gente nueva y mucho menos con ella, la verdad es que no me apetecía en lo absoluto.

—Creo que no nos conocemos, soy Molly.

Me da su mano para estrecharla pero tengo un vaso en una mano y una botella de vodka en la otra por lo que se vuelve un momento incómodo y simplemente le dedico una sonrisa.

—Soy Julie —me presento yo.

—Lo sé.

Asiento con la cabeza sin saber que más decir.

Termino de preparar mi bebida y vuelvo a darme la vuelta para darle la cara.

— ¿Y... cómo la estás pasando? —pregunto intentando de ser amable.

Ella parece pensárselo pero en realidad me parece que sabía muy bien su respuesta.

—No muy bien. No me gusta cuando otras chicas se lían con mi acompañante, ya sabes...

Enarco una ceja.

Chase había dicho que la había invitado porque ella quería venir y le debía un favor.

Sinceramente no sé a qué viene este planteo pero no me gusta para nada.

—Ajam.

Respondo seca.

No quiero pelearme pero con las caras que está poniendo me lo deja bastante difícil.

Cuando veo que no contesta nada y se limita a fulminarme con la mirada le vuelvo a hablar.

— ¿Qué necesitas Molly?

No le gusta para nada el tono en el que lo pregunto, lo noto en su cara y en el dramático jadeo que suelta. Solo le pregunté que quería, no sé por qué arma tanto show.

Cuando no me contesta estoy por darme vuelta para seguir con lo mío pero siento como su palma de la mano derecha choca contra mi rostro.

Auch.