VAMPIRE - Damon Salvatore

Capitulo 16

Después de clases. Blair se fue al grill a trabajar. Al llegar ella se cambió en el baño y guardo sus mochila en su casillero que estaba en un cuarto donde están todos los casilleros de los empleados y luego sale de ahí para ir a atender a los clientes. Se va afuera atender las mesas que les toco en su turno.

Blair no dejaba de pensar en todo lo que ha descubierto y que es real, primero pensó que tal vez todo fuera mentira y sea una mala broma. Pero Stefan se lo dijo, no es mentira, en verdad existen vampiros. Blair mientras atendía, llevaba pedidos, arreglaba las botellas y se llevaba las botellas vacías a la bodega. Nunca dejo de pensar en eso, ahora tenía mucho miedo. No puede decirle a nadie.

Al terminar su turno, se va al cuarto se quita el delantal y lo guarda en su casillero para luego sacar su mochila, cierra su casillero y sale del cuarto.  Justo cuando iba a salir se topa a Stefan, pero ella baja la mirada y hace que no lo ve para pasar por su lado y irse.

Blair

Al llegar a casa me fui directo a mi habitación, no tenía ganas de hablar con nadie, solo quería acostarme en mi cama y esperar a que el día terminará. Aun no puedo creer lo que haya descubierto, existen vampiros, todo tiene sentido. Esto es mucha información para mi me duele la cabeza de tanto procesar, lo que necesito es un baño ¡sí! Para relajarme y aclarar mi mente.

Entro a mi habitación dejo mi mochila en el suelo para luego tomar mi toalla y ir al baño. Entro al baño, me desvisto y abro la regadera para bañarme de pies a cabeza con mis ojos cerrados escucho como el agua cae en mi cabeza. Todo lo que investigué, todas esas víctimas sin sangre sin ninguna razón y lo incriminaban que fue un "ataque animal" cuando fueron vampiros. Mi instinto me dice que tenga mucho cuidado en lo que me estoy metiendo.

Necesito dejar de pensar en esto. Al terminar, cierro la llave y me seco con mi toalla para luego taparme con ella y salir del baño, me dirijo a mi habitación y cierro con seguro. Saco de mi armario mi pijama. Al tenerla puesta dejo mi cepillo de cabello en la mesita de noche y me acuesto en mi cama para luego arroparme hasta que mi puerta se abre y veo a una Elena asomada.

— Hola — saludó —. ¿Puedo pasar?

Yo me encojo de hombros y la dejo pasar. Ella entra para luego sentarse a una  lado de mi cama mirándome.

— Blair, ¿de qué estabas hablando con Stefan hace rato? — preguntó con su entrecejo arrugado —. Es que Stefan ha estado muy extraño últimamente, siento que algo me oculta y no sé que es.

— Nada. Solo quise hablar con él para hacer las pases, me di de cuenta que lo amas mucho y no merece tener una cuñada que lo traté mal — miento descaradamente.

Elena frunce el ceño.

— ¿Segura que no es nada? ¿Por qué sabes que me puedes decir lo que sea?

— Elena, no era nada importante. Solo quería hacer las pases es todo.

Claro y yo soy Hannah Montana.

Ella se me queda mirando un momento en silencio para luego dejar salir un suspiro dándose por vencida.

— Esta bien, no insisto.

— Oye, tranquila, Stefan es un gran chico él te ama — le digo.

Ella sonríe de lado.

— Te dejo descansar — antes de salir me mira —. Y una cosa, ¿tomaste tu medicamento?

Hago un mohín. — No.

— Blair.

— Ya, ya voy.

Ella sale de mi habitación y yo me pongo de pies para también salir, me voy al baño y abro el cajón en busca de mis pastillas, pero no las veo. Suspiro mirando la mesita de lavamanos y no había rastro de mis pastillas.

¿Dónde las deje?

Estoy segura que la novia de tu hermano se las agarró.

¿Vicky? No me sorprende para nada.

Regresó a mi habitación me acuesto en mi cama y apago la lámpara que estaba en mi mesita de noche y sin más cierro mis ojos obligandome a dormir.