QUEEN OF HEARTS- SANJIxTUxBUGGY

»ACE FIRE FIST«

Morgan

Me estaba yendo mejor que el día anterior aunque todavía era aburrido y agotador... Así que en algún momento de la mañana entré a la cocina para dejar algunos pedidos y me recargué en la barra.

-¿Me dan agua? Necesito agua- Suspiré poniendo la mandíbula sobre mi mano en la mesa.
-¿Caliente? ¿Fría? ¿Mineral? ¿Normal? ¿Con hielito? ¿Sin hielo? ¿Un juguito? ¿Frappé? ¿Malteada?- Preguntó Sanji acercándose a la barra y poniendo su brazo sobre ella, también su rostro, al igual que mi posición.
-¿Me preparas un frappé?- Sonreí ampliamente y el asintió con una sonrisita.
-Fresita, vainilla, chocolate, galletas- Decía mientras lo miraba a sus lindos ojos brillantes y azules, levantó una ceja- Coco, café, canela, caramelo, mango...
-De galletas, con chocolate y crema batida- Interrumpí emocionada y asintió.
-Lo que tú quieras- Susurró feliz y se alejó de la barra.
-¿Qué estás haciendo? No tenemos el tiempo- Lo regañó Zeff y estuve a punto de decir algo.
-¿De qué hablas? Puedo hacerlo con los ojos cerrados y me sobra tiempo- Contestó Sanji sacando varias cosas del armario de suministros.
-Oye, ya que estás aquí, lava algunos platos, tenemos demasiados y poco personal- Habló el otro cocinero, el de pelo afro azul.

Yo sonreí, salté sobre la mesa, cree un cuchillo de hielo, empujé al sujeto contra el refrigerador y borré la sonrisa.

-¿Por qué creíste que podías ordenarme algo?- Pregunté sosteniendo el cuchillo contra su cuello.
-Morgan, suéltalo, si no, tú nos ayudarás en la cocina- Habló Zeff sin dejar de batir algo como puré.
-Tentador...- Susurré pegando más el filo del cuchillo al cuello del moreno, veía su rostro, estaba asustado.
-Si lo matas no tendré tanto tiempo para hacerte postrecitos- Dijo Sanji con diversión y una falsa carita triste.

Solté inmediatamente al hombre, desaparecí la daga dejando solo un poco de escarcha y regresé a mi lugar.

-Tiene razón, ahora lavarás platos- Dijo Zeff y levanté ambas cejas.
-Claro que no- Gruñí pues los platos y yo nos llevábamos muy mal- Ni loca, si quieres cocino, corto, soy mesera o también traigo cosas del almacén... ¡Mándame a atender el bar! Pero jamás, jamás, los trastes.
-¿Y quién lo hará? Tenemos tres cocineros y cinco meseros- Dijo Zeff y yo sonreí.
-Lo que tienes es... Tres cosineros, un lava platos y cuatro meseros, uno de ellos más eficiente que los otros- Expliqué y me dí vuelta.

Caminé a la puerta, salí y al primer mesero que me encontré lo agarré del pescuezo.

-Zeff me mandó a decirte que lavarás los platos hoy- Dije viéndolo enojada y él asentía, luego lo empujé por la puerta- ¡De nada!- Grité entrando también.

El tipo corrió al fregadero y yo volví a sentarme en la barra, momentos después Sanji dejó un frappé en ella. Se veía delicioso, con crema batida, una cereza y... Dos sorbetes.

-Muy pronto- Le dije al notar que me miraba con diversión- Pero buen intento.
-Tal vez a la otra- Contestó entre risas quitando el sorbete extra y me reí también.

Empecé a tomarme esa cosa y... No podía ser, hasta esto sabía infinitamente mucho mejor que cualquier frappé que hubiera probado antes.

-Acábate eso y vete de aquí, distraes a la berenjenita- Me regañó Zeff y me reí, me había contado por qué le decía así, pero solo eso.
-Que malas vibras traes ¿Eh?- Dije después de darle un trago a la bebida.

Sería una pena terminar esto rápido así que mejor me fuí con mi vaso a otro lado... No iba a ponerme a trabajar con este delicioso frappé, entonces decidí pasar y dar una vuelta por afuera.

El muelle estaba lleno de barcos... Barcos fáciles de robar... ¡No! Mis hermanos venían por mí y así era mejor... Además me daba más tiempo de estar con Sanji y Zeff que eran bastante agradables... Y me causaban muchísima curiosidad.