Capítulo 18

6 1 0
                                    

Los dos hombres de Hammerhead continuaban picando sin descanso la tierra, de vez en cuando dejando respirar por el humo de tabaco que exhalaba. En cuanto a este, solamente miraba a sus dos lacayos trabajar. Ya falta poco para que tenga el meteorito en sus manos. Hubieron problemas por culpa de Spider-Man, pero ya tiene la victoria asegurada. Ni la policía ni los héroes de Nueva York detendrán al nuevo rey del crimen.

Sin embargo, lo que no sabían, es que una araña humana se encontraba arriba de ellos. Con Smythe fuera de peligro, podrá hacerle frente a Hammerhead sin ningún problema al no tener un civil en medio del fuego cruzado. Todo lo que tiene que hacer es esperar el momento adecuado para entrar en acción, luego salir con el meteorito en mano.

Facilito.

-Esperalo.-Vio como el agujero se hacía más grande ante cada golpe.-Esperalo.-El arácnido se preparó para el ataque. Falta poco.-Esperalo.-Al tener a la vista el meteorito, ha llegado el momento de actuar.-¡Ahora!-Se impulsó usando sus piernas y sus brazos. El arácnido giró en medio del aire aterrizando con su ya conocida pose, tomando por sorpresa a todos.

Primero, disparó telaraña a la cara de Hammerhead, dejándolo ciego de forma temporal. Luego, disparó dos líneas de telaraña ambos secuaces para acto seguido jalarlos hacia él, y al estar lo suficientemente cerca, los tomó por las cabezas y los estrelló contra el suelo, dejándolos inconscientes. Spidey los cubrió de telaraña.

Sin perder tiempo, el arácnido fue hacia el agujero que ahora se ha hecho grande por la excavación de los lacayos de Hammerhead. Y ahí está, el Prometheum X. A simple vista es una roca más del montón, pero la verdad es que contiene demasiada energía como para iluminar todo un continente. Es increíble que haya venido del espacio. Menos mal no trajo consigo una especie de virus.

Mientras tanto, Hammerhead se quitó la telaraña de la cara, y vio como Spider-Man estaba a punto de tomar el meteorito. Una vena palpitante apareció en su gran frente; esta vez no dejará que lleve lo que es suyo.

El sentido arácnido se activó justo cuando iba a tomar la roca. Miró hacia atrás, recibiendo un golpe por parte de Hammerhead. El impacto hizo que lo alejara a unos cuatro metros, pero el arácnido logró aterrizar con sus pies y manos en su ya clásica pose. Viendo como Hammerhead iba a sacar el meteorito, Spider-Man disparó dos líneas de telarañas para así tensarlas y salir disparado hacia el mafioso. Los pies de Spidey dieron con las clavículas de Hammerhead, empujándolo para mantenerlo lejos de la roca.

-¡Lo siento, pero yo lo vi primero!-Dijo el arácnido, impulsándose hacia el agujero, pero Hammerhead lo tomó de la pierna y lo azotó contra una pared, para seguidamente ser azotado contra el suelo, levantando una ligera nube de polvo.

-Quedate ahí si no quieres que te mate, insecto.-El mafioso levantó su pie y lo descendió hacia la cabeza del arácnido, pero Spider-Man rodó a la izquierda se puso de pie de un salto.

-Dices que no me vas matar, pero aún así lo vas a hacer. En fin, la hipocondríaca.-Se burló de lo que dijo. Se echó para atrás para luego golpearlo en el abdomen con codo, sacándole todo el aire. Luego lo golpeó con el mismo codo en la nariz, haciéndolo retroceder. Spider-Man disparó telaraña a los pies de Hammerhead.-Me gustaría quedarme a hablar mientras tomamos una tácita de café, pero tengo un paquete que entregar, y a un cabezón a quien debo encerrar.

El arácnido fue hacia el agujero, en lo que Hammerhead sacaba del bolsillo un revólver. Apuntó a la espalda de Spidey, y apretó el gatillo. La bala salió del cañón, al mismo tiempo que un sonido similar a una explosión hizo eco en la cueva. El sentido arácnido le advirtió de la bala acercándose a su espalda, por lo que el arácnido se dejó caer de espaldas al suelo, y por obra de la inercia, se deslizó. Vio como la bala pasaba por encima de él, y al no darle a su objetivo, se perdió.

Spider-Man and The Loud HouseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora