Capítulo 11

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Gaia

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Gaia

Decir que estoy disfrutando de mi estancia en Hawaii se queda corto. Amo estar aquí, la playa, la naturaleza. Todos los lugares a los que visitamos son realmente hermosos.

El primer día el señor Shepard y su esposa Adele, nos dieron una cálida bienvenida en el desayuno y después de eso compartimos recorriendo cada área del hotel mientras nos pedían que les contaramos nuestra historia. Al otro día salimos con un guía y varios nativos a conocer más la flora del lugar y en la tarde pasamos un buen y agradable tiempo en la playa. Hoy estaremos practicando ciclismo de montaña y a todos lados a los que vamos llevo mi cámara para captar todo en imágenes que me servirán más adelante. En realidad estaba en una especie de trabajo vacacional. Disfrutando de la semana, pero guardando contenido para el trabajo.

Termino de vestirme adecuadamente para el día de hoy, leggins hasta las rodillas y un crop top en negros y rojos. Salgo de la habitación para encontrarme con Nolan quien ya espera por mí para empezar la excursión del día de hoy, lleva puesto unos pantalones cortos deportivos y una polera de mangas cortas que me permiten ver mejor los músculos de sus brazos.

—Esta noche puedes dormir en la cama —le digo al ver como pasa una mano por su nuca y hace muecas.

—¿En serio? —cuestiona con una semisonrisa.

—Sí, yo dormiré en el sofá —añado apagando su sonrisa —No quiero ser la culpable de tus dolores.

—No dejaré que duermas incómoda —detecto un poco de molestia en su voz —Ni siquiera lo pienses.

No replico su decisión y solo me limito a seguirlo.

Salimos del hotel para unirnos con el guía y algunos turistas para la actividad de hoy. Nos entregan rodilleras y un casco a ambos como medio de protección y una vez estamos listos, montamos en las bicicletas de montaña y seguimos al grupo hasta que dejamos de tocar el pavimento y nos adentramos a la vegetación.

A medida que avanzamos al interior del bosque me deleito escuchando el cantar de las aves y la hermosa melodía del viento al mover las ramas de los árboles. Pedaleo con menos fuerza para poder deleitarme mejor con el paisaje a mi alrededor.

—Nos estamos separando del grupo —informa Nolan —Debemos alcanzarlos.

¿Es una broma? Quiero apreciar la naturaleza que me rodea, perderme en cada detalle de ella —incluso el más sencillo— no solo montar bicicleta como si estuviera haciendo ejercicio físico.

—Tomaré varias fotografías aquí —le hago saber y deteniendo mi bicicleta, bajo de esta y saco la cámara de su estuche.

—Podemos perdernos.

Un poco de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora