La sombra del viajero.

Capítulo 8: Batalla por Fontaine.

Fontaine.
La gente corría por doquier, los monstruos del abismo estaban por todos lados. Mucha gente ya había muerto y eran pocos los que intentaban hacerles frente, entre esos locos se encontraban Clorinde y Wriothesley, quienes peleaban con todas su fuerzas y trataban de ayudar a los civiles.

Clorinde estaba algo alterada, después de todo, tenía poco tiempo de haberse enterado de que el viajero era inocente, y ella jamás se detuvo a pensar en esa posibilidad, sólo le dio la espalda y amenazó con matarlo en el juicio de Fontaine. Mientras acababa con unos monstruos del abismo, recuerdos de ella y el viajero comenzaron a inundarla.

Flashback...
Hace 14 meses.
Después de haber detenido, o mejor dicho, de que Aether hubiera detenido la profecía y salvase a Fontaine de desaparecer en el mar, le fue organizada una fiesta en su honor, Clorinde no estaba tan segura de asistir, pero al recordar lo mucho que Aether había ayudado a su nación, a su hogar, creyó que sería una falta de respeto el no agradecer en persona.

Justo a mitad de la fiesta, Clorinde salió al balcón del salón a observar la ciudad, sin darse cuenta que el viajero también estaba ahí.

Aether: -Preciosa verdad? Alguien debería tomar una foto.- Dijo mirando hacia la ciudad.

Clorinde: -Viajero...Aether, que haces aquí? Creí que estarías en la fiesta.-

Aether: -Si bueno, necesito un poco de aire, además parece que algo te molesta, está todo bien Clorinde?-

Clorinde: -No puedo dejar de pensar en algo, en que si tú no estuvieras aquí, tal vez esta ciudad y su gente se habrían perdido para siempre, y ni todos mis años de experiencia hubieran podido ayudar.- La mujer aprieta sus puños.

Aether: -No llores el pasado Clorinde, gracias a ti y a Wriothesley es que mucha gente se salvó antes de romper la maldición.- Sonríe hacia la mujer.

Clorinde: -Si pero, mi misión es proteger Furina y a esta gente, y yo casi fallo, casi no pude cumplir con mi misión...-

Aether: -Misión? No somos máquinas Clorinde, somos personas, y a veces fallamos, cometemos errores, y eso está bien, eso nos hace humanos.-

Clorinde lo mira sorprendida, pero inmediatamente se molesta, no con él, si no con ella misma, por no poder comprender que significa eso.

Clorinde: -Pero mi profesión me indica que yo no debo fallar, yo debo ser...-

Aether: -Perfecta? Eso no existe Clorinde, créeme, o acaso sabes como luce la perfección? Sabes que es desempeñar tu labor a la perfección?-

Clorinde: -Pero yo...no...-

Aether: -Que es la perfección para ti? No cometer errores? Eso no significa nada, cometerás errores Clorinde, algunos peores que otros, pero para mi, la perfección viene de esos errores, aprendes de ellos y obtienes un mejor resultado.-

Clorinde se sonroja ante estas palabras, pero se voltea levemente para que el viajero no la vea, después de todo, ella está acostumbrada a ser vista como alguien fría.

Aether: -Se que tu trabajo es importante, que te lleva a lugares en donde debes mantener una frialdad casi robótica, pero por favor, no te niegues la oportunidad de vivir, no te niegues la oportunidad de ser humana.-

El rubio toma sus manos, claramente quiere ayudarla a que su trabajo no la consuma, o que esos pensamientos no acaben con su humanidad. Clorinde sólo se queda quieta, viendo como el viajero sostiene sus manos, y por primera vez en su vida, siente algo que jamás había sentido antes...calidez y...amor?

Clorinde: -Pero, y que pasa si un día fallo y cometo un error?-

Aether: -Te levantas, aprendes de ese error y sigues adelante, así es la vida Clorinde, jamás permitas que un error en tu trabajo te afecte, no dejes que se convierta en una losa pesada de cargar. Y si algún día lo haces...aquí estaré para ayudarte.-