Capítulo 29

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Las llamadas abrumaban el celular de Dan, el cual decidió apagarlo definitivamente y seguir su camino, quería ir hacia el cementerio donde estaba su abuela, quedaba un poco mejor pero así aprovechaba y caminaba un poco, a la final lo necesitaba.

Del hospital hacia el cementerio se tardó una hora en llegar, en el camino había comprado unas flores para ponérselas a su abuela, al entrar lo recorrió un sentimiento de nostalgia y al llegar a la tumba empezó a llorar, aún dolía como el primer día, aún la extrañaba y se guardaba todo su dolor porque sentía que molestaría a los demás.

— Como quisiera que aún estuvieras aquí, así podrías aconsejarme y decirme que hacer—dijo Dan entre murmullos— amó a Jaekyung pero no sé que me sucede, tal vez ¿estoy frustrado por qué ya no necesita acostarse conmigo para ganar una pelea? o quizá tal vez ¿Por qué no formalizamos una relación?, no lo sé, siento un miedo y rabia inexplicable, ni siquiera a Suni le he podido explicar esto, solo quiero dejar de sentirme así, te extraño mucho...

Cómo pudo secó sus lágrimas y colocó la flores en la tumba, empezó a caminar por el cementerio hasta que encontró una banqueta y se sentó a pensar todo lo que había pasado en los últimos meses, había conocido a Jaekyung, a todos los chicos del gimnasio, Jaekyung pagó sus deudas, ayudó con el tratamiento de su abuela y lo llevo a vivir con él, había conocido a Heesung, descubrió su embarazo, tuvo varios malos momentos con Jaekyung, varios momentos...

Sin embargo ahora todo estaba yendo muy bien y aún así no podía evitar sentir un vacío emocional muy grande, tenía claro que quería a Jaekyung pero sentía constantemente que algo podría salir mal, se sentía desanimado sin ninguna razón, ya no hallaba placer en cosas que antes disfrutaba y quería estar solo todo el tiempo, además de que se complicaba hablar de esto con Suni, sentía que solo estaba exagerando.

— Ay Ara, no entiendo que me pasa—Dan acarició su vientre— espero que cuando nazcas todo cambie para mejor...

Sin más salió del cementerio y tomó un taxi para ir a casa, en el camino encendió su celular y este empezó a vibrar sin cesar, no le tomo importancia pero ya se le habían quitado las ganas de volver a casa y se terminó quedando en la cafetería donde trabajaba el amigo de Jaekyung, al entrar notó que no estaba Chanwoo pero igual se acercó a preguntar.

— Buenas tardes ¿puedo tomar su orden?—el chico de la caja le sonrió

— Disculpa ¿se encuentra Chanwoo?—preguntó

— Oh, hoy es su día libre

— Entonces volveré mañana, gracias

— Espera, si necesitas hablar con él podría llamarlo

— No es necesario, gracias de todas formas—estaba por salir cuando vio en la vitrina un postre de arándanos, otro de manzana y así se quedó viendo todos hasta que la bebé se le empezó a antojar— dame uno de cada uno

— ¡Claro!—sonrió— son para llevar ¿verdad?

— Los comeré todos aquí, estaré por acá esperando

— No te preocupes, te los llevaré a la mesa

Después de un rato el chico sirvió uno por uno los postres y Dan se los iba comiendo como iban llegando, nunca se hallaba satisfecho así que no hubo ningún problema en terminarselos todos.

— ¿En todo el embarazo tuviste ese apetito?—preguntó el chico llevando un vaso de leche de a la mesa

— Ahora que lo pienso no, los antojos me llegaron a los 7 meses y si no como, mi bebé empieza a patear

Quédate Conmigo (JINX)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora