Bajo el destino de las estrellas

Entre Dos Mundos

La tensión en el aire era palpable cuando Tom decidió abordar la situación con Dua. Invitó a la cantante a una reunión en un café discreto, un escenario neutral para una conversación que prometía ser intensa. Mientras esperaban sus pedidos, el silencio era ensordecedor.

Finalmente, Tom rompió el hielo.

"Dua, sé que las cosas entre Margot y tú han tomado un giro inesperado. Mi intención no es confrontarte, pero necesito entender lo que está sucediendo".

Dua, consciente de la gravedad de la situación, asintió.

"Tom, entiendo que esto debe ser difícil para ti. Lo último que quiero es causar problemas en tu matrimonio".

Tom miró fijamente a Dua, sus ojos revelando una mezcla de emociones.

"Margot es mi esposa, y la amo más de lo que las palabras pueden expresar. Pero también estoy dispuesto a luchar por nuestro matrimonio si es necesario. ¿Qué es lo que sientes por ella, Dua?"

Dua respiró profundamente antes de responder.

"Lo que siento por Margot es complicado, Tom. No quiero herir a nadie, pero tampoco puedo ignorar lo que hay entre nosotras".

El café se llenó con la tensión que se desprendía de la conversación. Tom, visiblemente afectado, continuó indagando en los sentimientos de Dua.

"Entiendo que las emociones son complicadas, pero Margot y yo hemos construido una vida juntos. Si hay algo que pueda hacer para salvar nuestro matrimonio, estoy dispuesto a intentarlo".

Dua, sintiendo el peso de las palabras de Tom, respondió con sinceridad.

"Tom, no tengo intención de arruinar lo que ustedes tienen. Pero los sentimientos no siempre siguen las reglas. Margot y yo estamos enredadas en algo que ni siquiera puedo explicar completamente".

Tom, con una mirada intensa, buscó respuestas más allá de las palabras de Dua.

"Nuestro matrimonio no es solo mi vida, es la de Margot también. No puedo ignorar lo que está sucediendo. ¿Estás dispuesta a dejarla en paz si eso es lo mejor para ella?"

Dua, luchando con sus propias emociones, respondió con sinceridad.

"No quiero lastimar a Margot, Tom. Pero no puedo prometer algo que no sé si podré cumplir.

Tom fijó su mirada en Dua, buscando respuestas más allá de las palabras pronunciadas.

"Margot es mi esposa, y aunque pueda haber confusión en sus sentimientos, eso no invalida lo que hemos construido juntos. ¿Cómo puedo confiar en que no herirás a Margot si seguimos permitiendo que estas emociones crezcan?"

Dua, sintiendo la presión en sus hombros, respondió con sinceridad.

"No quiero ser la causa de dolor para nadie. Pero tampoco puedo negar lo que siento. Margot y yo compartimos algo especial, y es un terreno complejo. No tengo todas las respuestas ahora mismo, pero estoy dispuesta a afrontar las consecuencias de mis acciones".

Tom suspiró, sintiendo la magnitud del dilema que enfrentaban.

"No creo que puedas entender completamente lo que significa para mí. Somos una familia, y Margot merece más que un matrimonio roto".

Dua, con una mirada apesadumbrada, respondió:

"Lo sé, Tom. Y no quiero destruir lo que han construido. Pero también es injusto para Margot y para mí negar lo que sentimos".

La conversación se sumergió en un silencio tenso, dejando en el aire la incertidumbre de lo que el futuro podría deparar para estos tres corazones entrelazados en un enigma de amor y lealtad.