Ahora todo estaba tan claro como el cristal. Durante los últimos diez años, Anderson había estado trabajando con gente que diseñaba en su nombre, lo que significaba que todas sus obras habían sido creadas por otras personas. Además, a juzgar por lo que acababa de hacer, no solo carecía de talento, sino que también carecía de ética. ¿Cómo podría alguien confiar en un hombre que engañaba y difamaba a los demás por el mero gusto de conseguir halagos y la fama?
-¿Dónde escuchó eso?-
Con su rostro pálido como un fantasma, Anderson habló sin pensar después de darse cuenta de lo que Victor acababa de decir.
Antes de que su engaño saliera a la luz tenía planeado encubrir a Rose para ganar dinero fácilmente. Debido a que fue Jack quien se lo había pedido decidió mentir para ayudar a Rose, pero lo último que esperaba era que Víctor revelara su secreto al público.
-¡Expulsen a Anderson del círculo de la joyería! ¡Y a Rose también!-
En un instante, todos en el público cambiaron de parecer, y empezaron a ver a Anderson y Rose como los verdaderos culpables. Casi ahogado por la ira y el desprecio que estaba recibiendo por todos lados, Anderson no pudo soportar más la humillación y huyó del lugar sintiéndose abatido.
Rose no podía creer lo que estaba viendo, ya que pensó que su plan era perfecto y que ganaría en este juego. Desafortunadamente, Dios había deparado algo distinto para ella. ¡Otra vez su plan había sido arruinado! ¡¿Por qué la suerte siempre estaba del lado de Emiy?!
Como Anderson se había escapado, la audiencia, sintiéndose engañada por el y Rose, se ensaño con ella.
-¡Vete a casa, Rose! ¡Qué vergüenza!-
Comenzó a gritar el público y algunos incluso arrojaron botellas al escenario.
Apretando furiosamente los dientes, Rose huyó del escenario, tratando de evitar que las botellas cayeran sobre ella. Al bajar del escenario la estaban esperando más insultos y miradas del desprecio por parte del público.
Emily no esperaba que pudiera convencer a todos tan rápido, incluso se había preparado para afrontar,
En el momento que la botella estuvo a punto de golpear a Emily, una mano apareció repentinamente ante ella y la atrapó.
Al ver esto, Jacob, quien se había levantado de su asiento, volvió a sentarse, lanzando desde la distancia una mirada sombría en dirección a Emily.
Esta última pronto se dio cuenta de lo que había sucedido. Miró a Victor, quien había aparecido repentinamente ante ella de la nada, y tartamudeó.
-Señor... Señor Victor...-
-¿Estás soñando despierta?-
Seguidamente, Victor soltó la botella que había atrapado con la mano y miró directamente a Emily.
Él era un hombre muy guapo, con unos rasgos muy estilizados y bien definidos. Aunque ambos eran hombres muy atractivos, Victor tenía una naturaleza más gentil comparación y reservada, en con el carácter ligeramente agresivo de Jacob. Incluso sus gafas con montura dorada lo hacían ver más atractivo ante sus jóvenes admiradoras.
Completamente asombrada de ver a su ídolo parado justo frente a ella, la cara de Emily involuntariamente se sonrojó.
-Gracias, señor Victor-
Estaba realmente agradecida con él, no solo por salvarla de la botella voladora, sino también por haberla ayudado en su disputa contra Anderson. De no ser por Victor, Emily no habría podido demostrar su inocencia con tanto éxito.
-¡Felicidades!-
Victor le asintió con la cabeza a Emily, le tendió la mano y agregó con una voz tranquila.
ESTÁS LEYENDO
Los Besos de Jacob
Random-Si pudieras pedir un deseo, ¿qué pedirías?- -Pediría que me amaras otra vez, Jacob... Pero esta vez, para siempre- En el pasado, él la amó incondicionalmente, pero la perdió cuando perdió la memoria. Emily se quedó al borde del colapso cuando se s...
