SECOND HALF

CAPÍTULO 10

KATHERINE

Asistir a la gala fua una decisión de la que no estaba completamente segura, pero ya no podía retractarme, no cuando estábamos a metros de la entrada, sin embargo, mis nervios estaban a punto de traicionarme y sentía como si mi cuerpo temblara de pies a cabeza.

Tenía miedo, tanto miedo que me costaba respirar, pero el miedo no podía detenerme ahora, no cuando estaba a solo unos pasos de entrar a aquel salón, así que me armé de valor y seguí avanzando hasta que los ojos de los invitados se centraron en mí.

Brenda estaba a mi lado, como siempre y eso me reconfortaba, pero aun así sentía como si en cualquier segundo fuera a desmayarme o a salir corriendo alejándome de este lugar; estaba segura de que, si ella no me sostenía, me iría de frente hacia el piso, pero no podía ceder ante mis emociones ahora, solo tenía que mantenerme tranquila y continuar avanzando hasta que la noche terminara.

Las personas comenzaron a acercarse a saludarme y eso poco a poco consiguió que me relajara, pero los nervios seguían ahí, palpitando, deseosos de desestabilizarme por completo, sin embargo, Brenda estaba aquí, tomando mi brazo y manteniéndome cuerda, lo que por el momento era suficiente.

Continué avanzando entre los invitados, recibiendo saludos y elogios que correspondía con educación, pero entonces, me giré y mis ojos se encontraron con los suyos; era Asher, era él y estaba a solo unos cuantos pasos.

Mi corazón comenzó a latir como loco en mi pecho y cada vez me era más difícil respirar; había cambiado, se veía más alto, más fuerte y varonil, pero era él, era el chico que conocí hace ya tanto tiempo y el solo mirarlo me había dejado sin defensas.

Habían pasado seis años y mi corazón seguía acelerándose por él, ¿Es que acaso estaba loca? ¿Por qué me quedaba como tonta mirándolo? Estaba segura de que cuando volviera a verlo le gritaría o lo golpearía, pero nunca imaginé que me quedaría quieta sin ser capaz de moverme ni un centímetro y sin ser capaz de despegar mis ojos de los suyos; ¿Qué me estaba pasando?

Debía odiarlo, debía estar furiosa por lo que me hizo; tendría que estar molesta y con ganas de hacerlo pedazos, pero en lugar de eso solo sentía un nudo en el estómago y un terror demasiado grande, por lo que en cuanto lo vi dar un paso hacia adelante, prácticamente salí corriendo arrastrando a Brenda conmigo mientras me escondían entre las personas.

Este había sido un error, no debería estar aquí; no estaba lista para verlo, no estaba lista para enfrentarlo, no era capaz de hacerlo, no podía y ahora lo tenía claro; tenía que irme, tenía que salir de aquí antes de que volviera a verme.

-        Kat, tranquila, respira – pidió Brenda frenando mi huida

-        Era él... - murmuré en pánico

-        Lo sé – respondió Brenda tomando mis manos – Ahora respira, por favor, tranquilízate

-        No puedo – mi corazón latía tan rápido que temía que en cualquier segundo fuera a salirse de mi pecho; tenía miedo, tanto miedo que me costaba respirar y pensar

-        Kat – repitió Brenda, pero antes de que ella pudiera decir algo más, volví a girarme, quizá por instinto o ansiedad y nuevamente lo vi

Asher me estaba buscando entre la multitud; me estaba buscando con la misma desesperación con la que yo intentaba huir de él, pero aunque parte de mí me pedía a gritos que me quedara y enfrentara lo que tuviera que suceder, no era capaz de hacerlo; todos estos años creí que lo había dejado atrás, me convencí de que ya no era esa niña asustada y perdida que él dejó en aquel pueblo; me convencí de que todo en mí era diferente, pero volver a verlo me trajo de regreso a ese momento; volverlo a ver me convirtió de nuevo en aquella chica temerosa que no sabía que hacer con su vida y esa sensación era aterradora.