Mikaelson's soulmate

Rebekah

New Orleans, USA

Una vez logro recuperar mi equilibro me levanto mirándolo como si no creyera que fuera real, está aquí, finalmente aquí.

Saltó en sus brazos, mi cuerpo lo pide a gritos.

-No sabía que querías que me quedara.

-Ahora estamos juntos, por siempre

- y para siempre- completa Elijah.

Marcel se va entendiendo que quieren estar solos conmigo, me siento pequeña, como una oveja al lado de dos lo

Dos días después, New Orleans.

Los días se han pasado volando, ahora trabajo en un bar/restaurante del barrio francés sin que Klaus o Elijah se enteren.

Admito es muy extraña toda la situación pero he aprendido a aceptarla, me siento conectada a ellos.

- Cami, no te había visto, me asustaste. - digo al sentirla atrás mío.

-Perdón, estoy tratando de evitar a alguien, un paciente loco, se llama Dan.

Cami fue una chica que conocí en un carnaval, es bastante amable, trabaja de psicóloga, justo la clase de amiga que necesito, alguien estable.

- Bueno ya casi vamos a cerrar, hoy me voy con Dayana así que puedes venir con nosotras.

Salimos las tres, ambas se llevan muy bien, les digo que se vayan para que no se desvíen a mi casa. La casa de Klaus y Elijah.

- Se miran amigables, Dayana es española, llegó hace cincuenta años, peleó en la guerra a un nivel respetable ¿Qué haces aquí linda? - La voz de la nada me hace pegar un salto.

El moreno suelta una risa al ver mi reacción.

-Marcel, tienen que dejar de hacer eso, tú, Klaus, Elijah, todos los vampiros existentes, espera ¿Dayana es una vampiro? ¿Hay alguien aquí que no tenga colmillos?

- Las brujas claro, esas tienen cuchillos, esto es New Orleans linda, la magia se respira en el aire, Dayana es una de mis diurnas, ahora Camille es una belleza que no he tenido el placer de conocer, deberías presentármela pero dime Jenn ¿por qué no estás con tus destinados?

- Estoy trabajando, no digas nada al respecto, tengo hermanos que necesitan dinero para poder comer, está lo de la herencia pero no lo quiero tocar hasta que ambos tengan edad para tenerlo y deja en paz a cami, es demasiado buena.

- Por eso me gusta, podrías decirles, son absolutamente ricos, si no quieres solo pídeme ayuda a mi.

- Gracias, no es necesario de todos modos, yo puedo con eso, tal vez después de todo si te presente a Cami.

El moreno me sonríe y me tiende su brazo, lo agarro y caminamos hasta la casa, todo está prendido, logro notar la expresión de marcel cambiar, una cara que nunca había visto.

- Pensé que tenías mejor gusto. - ¿quién es ella?

Una hermosa rubia se acerca a nosotros, me inspecciona con un poco de ¿celos? ¿Odio? Tal vez ambas.

- ¿cómo sabrá? - agarra mi cuerpo y me estampa contra la pared colocando sus colmillos en mi cuello. ¿Por qué mierda siempre termino así?