Rain Kisses || Minsung

⛆06

Diez minutos.

Hace diez minutos que la puerta estaba siendo tocada sin cesar.

—¡Felix! ¡Se que estas ahí, ábreme!

Tenía dos opciones, abrir y conversar con él, tratar que no se vuelva un salvaje por no ver a Felix o esperar a que llegue Minho y que hablen entre ellos, sin que ambos se maten.

¿Por qué tenía miedo? Pues, el ex novio de Lix no se tomó bien la ruptura como tampoco acepta que Felix ya no le pertenece, aun cree que están juntos.

Mi celular vibró y al verlo sonreí, era MInho.

—¿Qué hace el carro de Hwang afuera?

Al querer responder los gritos del rubio empezaron a subir de tono.
—No te muevas, estoy a un piso.—susurré un "si" y apague el celular.

—¡Lee Felix!—más golpes.

Me tapé los oídos cuando su grito me aturdió. Hasta la fecha no entendía como Lix había salido con él por varios meses aunque al inicio se había comportado de la mejor manera no lo justificaba. Conforme las semanas pasaban el se comportaba peor.

Recordaba el día que habían terminado, no es bonito recordar.

Mi celular volvió a vibrar y me esperé un mensaje de Minho pero no, era Felix.

"Estamos yendo a casa, la función del autocine se canceló :("
"Pero estamos pasando por chucherías y haremos una maratón de comedias románticas :D"

Palidecí.

—¡Lee!

—¡Hwang! ¿Me buscabas?

Me acerqué al monitor y suspiré de alivio al ver a Minho, quien aún tenía la venda en su tobillo. En las últimas semanas había mejorado y ahora podía pararse por cortos tiempo pero la molestia aun seguía, después de la corrida que se había dado le empezaría a doler.

Coloqué mi oreja sobre la puerta para poder escuchar la, para nada tranquila, conversación que tenían los mayores.

—Lee Minho, cuando no el señor entrometido metiéndose en donde no te llaman. ¿No te cansas?

—¿Y tu no te cansas de ser tan reprimido?

—Mira quien habla, el chico que toda su adolescencia iba de consultorio a consultorio porque sufría de problemitas.—apuntó a su cabeza.

Vi el monitor con un poco de miedo, sabía lo que trataba de hacer el rubio; quería sacar de sus cabales a Lee y, aunque nunca funcionaba, no sabía porque tenía un mal presentimiento.

Minho apretó sus puños y lo vi respirar hondo para tratar de calmarse—. Será mejor que te vayas antes que llame a seguridad, no querrás terminar en la comisaría ¿verdad?

—¿Me estás amenazando?

—No. Solo te recuerdo que posición tienes en el equipo, dudo mucho que quieras perder tu beca por estar armando un escándalo estando drogado.

Los ojos del contrario no pasaron desapercibidos. Tenían un brillo demasiado particular, cada palabra que Minho decía se la tomaba a broma, tiraba insultos y mentiras sobre Minho.

Esperaba que lo fueran.

Lanzaba comentarios que, para mi eran hirientes y al ver como el cuerpo de Minho se tensaba ante cada una, sabía que para él también estaba siendo duro escuchar todo eso. Y la esperanza de que todo fuera mentira desapareció.

¿Como Hyunjin sabría todo eso del mayor?

Hyunjin tuvo el impulso de acercarse y golpearlo pero Minho detuvo su puño—. Eres un...