7: como si fuese la primera vez

8 3 0
                                    


Sunghoon lo atrapó entre sus brazos, cubriéndole la boca para evitar que gritara y lo llevó a su departamento mientras lo sujetaba con fuerza.

SeokJin comenzó a sentir un dolor horrible en su abdomen bajo, estaba haciendo demasiada fuerza.

Lo aventó en el sofá y lo tomó de las mejillas con una mano para que lo mirara.

—Tú me debes algo idiota, por tu culpa tuve que pasar días encerrado. —alzó su mano para golpearlo, pero se le desvió la mirada hacia abajo viendo el apenas hinchado vientre—. Solo porque tienes a ese feto de mierda ahí no te golpearé, pero si por mi fuera te mato, eres insoportable, a parte ese mocoso ni siquiera es mío.

—Ya no me importa si no me crees, ni creas que te necesito.

—Luego cuando ese imbecil te eche a la calle ahí vas a venir a rogarme.

—¿Estás bromeando? Contigo no vuelvo así me esté hundiendo en la pobreza.

—Maldito infiel, no sabes como te odio a ti y a ese fenómeno. —señaló el vientre.

—¡A mi bebé no le hables así! Él no tiene la culpa de nada. Pensaba en dejar que lo conocieras, pero prefiero que mi bebé no se entere quien es su verdadero padre, Hoseok tiene razón, solo se va avergonzar.

—No gracias, no quiero saber nada de ustedes, aparte estoy muy seguro que no es mío.

—Tú eras el único en ese entonces... pero está bien, piensa lo que quieras, a mi bebé lo odias pero a tu otro hijo lo amas, que gracioso.

—¿De qué hablas? Enfermo.

—Cuando nos casamos dijiste que querías tener muchos hijos, pero claro, que tonto fui, siempre te gustaron más las mujeres, a mi solo me tenías de tu esclavo.

—Deja de hablar idioteces.

—Te deseó lo mejor, a tí, esa mujer y tú bebé. —se levantó y salió del departamento, dejando atónito a Sunghoon.

Llegó a casa, eran las 6pm, lo cuál significaba que Namjoon llegaría en cualquier momento.

Se apuró ir a la cocina a hacer la cena, incluso hasta se le olvidó el dolor que le había dado.

A la media hora Namjoon llegó, se dirigió a Jin y le dio un beso en la mejilla.

—¿Cómo te fue? —preguntó Jin mientras servía la comida.

—Bastante bien, hubieron muchos pacientes, atendí a varios donceles y mujeres, no pude evitar pensar en nuestro bebé, ya quiero que nazca.

—Yo también ya quiero que nazca, quiero cargarlo y cantarle muchas canciones.

—¿Y tú? ¿Te sentiste bien?

—Yo... quiero contarte algo, pero por favor no te enojes.

—Sabes que puedes confiar en mí, jamás me enojaría contigo.

—Fui al departamento de Jungkook... —Namjoon se tensó y abrió los ojos al escuchar aquello—. Hablamos, y cuando ya me venía, Sunghoon me metió al departamento.

Namjoon solo se quedó mirando a la nada sin decir nada, no quería alterarse, pero tampoco quería poner en peligro a Jin.

—Jin, solo ya no vuelvas ahí, por favor, ¿qué hubieras pasado si le hubiera hecho algo al bebé o a ti? Yo jamás me lo hubiera perdonando, por favor Jin. —habló con voz suave.

—No lo volveré a hacer, te lo prometo, solo tenía que hablar con Jungkook, es mi amigo y merece saber todo, perdóname por irme sin avistarte.

—Está bien que salgas, solo por favor avísame y mándame ubicación, en verdad no quiero soñar sobre protector pero es por su bien.

Lots of hopesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora