Ahora los 3 estaban en la sala hablando sobre Jungkook.—Sabes que lo que decidas nosotros te apoyáremos. —acarició su cabello.
—Solo lo veré si ustedes están presentes.
—Está bien princesa, ¿te parece mañana después de la escuela?
—Sí...
Eugen no estaba del todo convencida, pero tampoco quería ser grosera con quien le dio la vida y mientras estuvo con él la trató de la mejor manera y nunca le faltó nada, estaba consciente de todo eso.
Siendo una niña de 8 años captaba todo eso.
. . .
Pasaron por la niña a la escuela y acordaron en verse en el centro comercial.
Se sentaron en la mesa de una cafetería y ahí esperaron hasta que Jungkook junto con su pequeña y esposo se hicieron presentes.
—Eugen... —sus ojos se cristalizaron y quiso correr a abrazarla de inmediato, pero no pudo cuando vio que la niña se levantó y se paró frente a él. Solo lo saludó con una reverencia.
—Hola, ha pasado mucho tiempo que creía jamás verte.
—Hija...
—Así que vas a tener otro bebé, felicidades por ustedes, se ve que son una familia muy feliz al igual que yo con mis papás. Dios, no puedo pedir algo más, estoy muy bien y no me hace falta nada~ más.
Eso fue un golpe para Jungkook, se sintió tan mal de escuchar eso, de haber perdido a su hija. Ya no era la niña tierna que le decía "papi Jungkook eres lo máximo te quiero mucho".
—No hija, déjame explicarte.
—No es necesario, ya lo sé todo y aún así me duele, pero creo que de eso lo hablaremos en otra ocasión, y... ya no tengo tanto rencor, pero aún así lo hiciste y dejaste la cicatriz que jamás se curará.
—Eugen. —habló la pequeña niña de dos años.
—Hola hermanita. —la saludó.
Con el poco tiempo qué pasó con ella le tomó mucho cariño, y claro, ella no tenía la culpa de nada.
—Ven con papá. —jaló de su abrigo.
—Papá Jungkook, si quieres puedo estar contigo solo los sábados y ese mismo día regresarme con mi papás, la verdad es que me gusta pasear los fines de semana con ellos.
A Jungkook le brillaron los ojos y asintió.
—Perdóname Eugen, perdóname por no pensar en ti y ser un egoísta, yo estoy muy arrepentido, te amo mucho y eres mi princesita, mi primera hija, no debí pero ya es tarde, perdóname por favor. —se arrodilló ante ella mientras su esposo lo sostenía.
—Sí, ya, te perdono. —lo ayudó a levantarse y aceptó el abrazo de Jungkook—. De todas formas eres mi padre y no puedo odiarte.
—Puedes hacerlo, solo por favor deja que te vea, quiero recompensarte todo este tiempo.
Y así fue como Jungkook recibió una oportunidad de parte de su hija y ex.
. . .
Jin decidió regresar caminando de la escuela a casa, pues pasaría por unas cosas al supermercado.
Después de hacer las compras volvió a caminar para la casa, y para llegar más rápido se metió por un callejón que salía directo al lugar donde se encontraba la mansión.
—¿SeokJin? ¿Mi amor? —escuchó que lo llamaron.
Volteó y ahí estaba.
Sunghoon vestía ropa vieja, literalmente parecía un vagabundo.
—Mi amor por fin te encuentro, no sabes la falta que me haces. —casi corrió a él.
SeokJin al verlo tomo su celular y quiso correr, pero de inmediato fue detenido por Sunghoon.
—Déjame.
—Tienes que volver conmigo. —lo tomó del mentón e intentó besarlo.
—DÉJAME MALDITO ASESINO. —verlo le daba asco, le daba rabia recordar que por culpa de ese idiota perdió a su bebé.
—¿Cómo te atreves a hablarme así? ¿Acaso estás de mente? Maldito bastardo. —de su pantalón sacó un trapo y lo puso en la nariz de SeokJin así desmayandolo.
Lo cargó y entró en una de las puerta de lámina que estaban sobre ese callejón, tal vez daban hacia un bar.
ESTÁS LEYENDO
Lots of hopes
FanfictionNamjoon decide encargarse del hijo de SeokJin tras ver que Sunghoon, el esposo de este lo maltrata, lamentablemente de tanto golpe de parte de Sunghoon, Jin pierde a su bebé, quedó destrozado y debido al trauma busca la forma de volverse a embarazar...