Siete años, siete malditos años y ni una sola noticia de su paradero. Sharon se negaba a decirle de su ubicación, Kurt se había negado al último segundo a su compromiso.
Andrew y él habían tenido algo muy hermoso, el azabache lo había amado con toda su alma, pero él no podía dejar de pensar en la melena soleada que tanto lo deslumbraba.
Por lo que habían terminado en buenos términos, seguían siendo amigos solo que el azabache había encontrado a alguien que lo acompañase en su viaje. Bill Kaulitz.