BTS ONE SHOTS

Jimin

**********

Les recuerdo que este es un fanfic y que las situaciones expuestas NO SON REALES. En este capítulo se recomienda discreción ya que hay ciertas escenas de violencia.

***********

―Te llamo luego YooJin―guardé mi teléfono, ―Pero que mier...―no pude terminar la frase ya que perdí el conocimiento. ―¿En dónde estoy? ―musité levantándome con cuidado del sofá en el que me encontraba, intenté abrir la puerta pero se encontraba asegurada. ―mierda, mi teléfono―busqué desesperada en mi abrigo pero no lo encontré.

―Ya despertaste bonita―aquella voz se me hacía demasiado familiar.

―¿Jimin?―pregunté sin entender, ―necesitamos salir de aquí, antes de que vuelva ese loco―musité golpeando la puerta con fuerza.

―Te vas a lastimar.

―No me importa, solo quiero salir de aquí―sollocé bastante asustada por la situación en la que me encontraba.

―No llores bonita―Me abrazó con fuerza―Jamás te lastimaría―Sus palabras me asustaron más y me alejé de él, tomé una de las sillas que se encontraban en el lugar.

―Déjame ir―pedí mientras lo amenazaba con la silla.

―¿Bromeas amor? ―Se empezó a reír como un psicópata, ―Jamás te dejaré ir. Recuerda que eres solo mía―hizo gran énfasis en la última frase y se comenzó a acercar.

―¡Aléjate!―grité moviendo la silla, pero él me la logró quitar.

―Eres una chica muy mala cariño―dejó la silla en su lugar y se sentó en ella mientras me observaba.

―Por favor Jimin, déjame ir―pedí nuevamente, ―si lo haces prometo que no le diré a nadie que fuiste tú.

―Mi amor, mientras estés aquí nadie te alejará de mí y estaremos juntos por siempre.

―Jimin―sollocé y él se acercó a mí para limpiarme las lágrimas.

―No llores, te amo―tomó mi rostro e intentó besarme pero mordí su labio para que me deje en paz. ―Me encanta tu iniciativa―dijo de forma bastante provocativa haciéndome sentir demasiado miedo.

Luego de aquella escena me alejé lo más que pude de ese loco y me quedé lejos en una esquina, para intentar planificar como salir de aquel lugar.

―¿En dónde estamos?―pregunté.

―No soy idiota cariño―respondió en la cocina.

―Me gusta vivir en Seúl―dije con la esperanza de que escuchara.

―Pues estamos en Seúl―Esa es una buena pista, eso quiere decir que si puedo escapar seguramente encontraré ayuda. ―La comida está lista, espero que te guste―sonrió y me acerqué para poder comer.

―Está delicioso―solté. ―¿Por qué no te acercaste a mí en la universidad?―pregunté con un poco de miedo.

―Todo el tiempo estás con ese idiota de MinHo, es imposible hablar contigo.

―Claro que estoy con MinHo, él es mi novio―solté sin pensarlo bien y me gané una mirada demasiado aterradora por parte de mi captor. ―Eso era antes... Ahora tengo solo ojos para ti―intenté arreglar mi error e intenté tomar su mano.

―Él único hombre de tu vida soy yo―gruñó, tomándome del rostro de forma bastante violenta.

―Lo lamento―dije―Me haces daño... Jimin... yo te amo―sollocé.

―Yo también te amo―tomó mi rostro para besarme y esta vez intenté seguirle el ritmo. ―No sabes cuantas veces imaginé este momento―sonrió demasiado feliz.

Luego de terminar de comer empezó a arreglar y limpiar la cocina.

―¿Crees que puedo ayudarte? ―pasé mis brazos detrás de él y lo abracé.

―Yo haré todo por ti preciosa―sonrió mientras continuaba lavando los platos.

―De acuerdo, voy al baño―musité y caminé de prisa. Con la esperanza de encontrar alguna forma de salir―perfecto―musité al ver una pequeña ventana, coloqué unas cuantas cosas detrás de la puerta para evitar que se abra y como pude rompí la ventana para escapar.

―YooRi, abré la maldita puerta―gritó Jimin intentando entrar. ―Te estoy dando una maldita orden―volvió a gritar, logrando mover algunas cosas. ―Estás haciéndome enfadar y no te gustará verme enfadado.

Casi me encontraba afuera, pero él logró tomarme del pie y a arrastrarme. Empecé a sentir miedo y con todas mis fuerzas lo golpeé con mi pie.

―¡Bien hecho! ―Me dije a mi misma mientras empezaba a correr como una loca. ―Ayuda por favor, me secuestraron―grité a todo pulmón, llamando la atención de algunas personas quienes rápidamente llamaron a la policía.

Di mi declaración para que puedan atrapar a Jimin y mientras lo hacían empecé a vivir con MinHo además de tener resguardo policial hasta el día en que lo atraparon. A pesar de todo debía testificar en su contra el día del juicio.

―Señorita Lee―dijo el abogado que me estaba ayudando. ―Reconoce a este hombre como la persona que la privó de su libertad―yo asentí.

―Mi amor, no digas mentiras. Tu me amas por eso te quedaste conmigo―dijo Jimin intentando zafarse del agarre de los guardias.

―Claro que no Park... Me secuestraste―grité comenzando a llorar, ―y fueron los momentos más aterradores que he vivido.

―Señor fiscal, no creo que necesite más evidencia por parte de mi defendida―indicó mi abogado y el fiscal accedió a que me retirara.

DOS AÑOS DESPUÉS.

Luego de aquellos traumáticos sucesos, me fui a vivir en Daegu junto a mi novio MinHo, en teoría empecé a vivir mi vida nuevamente y podía decir que casi he superado el trauma que me hizo vivir Park Jimin.

MinHo se marchó al trabajo y yo me quedé en casa para trabajar, estaba casi terminando unos informes cuando recibí un ramo de flores hermoso junto a una carta.

Mi querida YooRi.

Te amo demasiado... y nunca dejaré de hacerlo.

Por cierto ayer te veías demasiado hermosa con ese vestido.

Con amor Park Jimin.

Me sentí demasiado confundida y prendí el televisor para poder ver las noticias y confirmé lo que más temía. Jimin había escapado de la cárcel desde hace algunos días.

―Mi amor, supongo que ya te enteraste de la buena noticia―voltee a ver y lo encontré sonriendo.