Esta historia narra la vida de nuestro personaje principal, a lo largo de Hogwarts Legacy. Así como las diversas situaciones y aventuras que acontecen, y las distintas relaciones que se crean entre los diversos personajes.
Podía sentir su mirada candente en mi nuca. Pero me sentía incapaz de girarme y enfrentarme a mi profesor de Pociones. ¿Cuánto tiempo llevaba allí? ¿Hasta dónde había podido ver? ¿Pensaría que su estudiante había perdido la cordura? ¡Madre mía! ¡Qué horror!
Un día de estos sufriría un ataque al corazón, no podía ser saludable vivir en un constante tobogán de emociones. Al menos, me bajé de la cama, para intentar parecer algo más digna. ¿A quién quería engañar? Seguro que mi profesor había presenciado aquella patética escena de principio a fin.
-¿Puede explicarme qué acabo de ver exactamente?-no pude ignorar por más tiempo a mi profesor. Me giré. Estaba absolutamente aterrada.
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Su mirada era severa. ¿Realmente era un crimen estar enamorada de tu profesor? Porque su mirada parecía decir que sí. Que no tenía ningún derecho.
-¿Y...?-inquirió mi profesor, impaciente, devolviéndome a la realidad.
No tenía escapatoria alguna. Sopesé todas mis opciones. ¿Salir corriendo? ¿Otra vez? De nada serviría, antes de salir siquiera por la puerta ya me habría alcanzado.
Así que este sería mi final, no podía seguir evitando por más tiempo la situación. Así que me dejé llevar por mis sentimientos, simplemente actué.
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Abracé por la espalda la figura enorme de mi profesor de Pociones. Sin aviso alguno.
-¡¿Qué...?!-exclamó el profesor Sharp claramente sorprendido.
Mi profesor de Pociones se puso inmediatamente rígido de la impresión. Sentí cómo contenía su respiración. Estaba abiertamente incómodo con la situación. Probablemente aún no me había apartado de su lado simplemente porque era educado y no quería herir mis sentimientos de forma tan directa. Sin embargo, su mirada acerada lo decía todo.
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