yours ⁞ pondphuwin

01. la noche

La noche más especial para Ekilam se acercaba... Ensayaron por meses, escribieron una canción original y pudieron conseguir el suficiente público para pedir su presentación en el bar más exclusivo de la cuidad. Tenían todo lo que necesitaban y aún así, algo faltaba.

Ekilam, la banda de rock indie conformada por cuatro integrantes. Creada hace dos años, con el primer nombre de SOLID y seis integrantes iniciales, larga historia. Ahora eran conocidos por ser el grupo más famoso de la cuidad y expandiéndose al país.

En la sala de ensayo resuena la voz de Joong, el bajo de Pond lo acompaña haciendo la base, la batería de fondo, realmente no se oye mal pero algo está fuera.

—¡Gem deja de pensar maldita sea! —grita Jan dando una mirada amenazadora. Gemini le muestra el dedo del medio, estaba odiosamente distraído ese día.

Joong cierra los ojos y canta las notas altas, Pond afina la base mientras maneja su bajo con atención aportando con los coros.

Jan toma el control con su batería haciendo su protagónico con poder. Las armonías se juntan en un equilibrio espectacular para el oído.

Esa era la magia que existió desde el primer día, todos dieron su talento y cada uno aportó a Ekilam la calidad y el sentimiento que hace falta para una buena banda.

—¡Vamos que mañana es la noche! —grita Jan en medio del sonido retumbante.

La batería se detiene para que Gemini sobresalga con su guitarra eléctrica en el último solo, Joong se une al final y terminan. Comparten una mirada insatisfechos y niegan cansados.

—No entiendo qué falta —murmura Joong mientras apoya su frente por el micrófono.

Practicaron tanto toda semana y aún no termina de encantar, no se oye lo suficientemente grande y agradable para ganar algún premio. Menos el contrato con la disquera más importante del continente.

Gemini se quita la correa de su guitarra azul y se tira al sofá para tomar agua, está agotado; Pond sigue calentando su voz para los coros; Jan se pasa la mano por la cabeza, su muñeca le duele como la mierda.

De pronto entra al garaje Tay aplaudiendo. Su casa era la casa de Ekilam. Tawan fue quién los unió en primer lugar y prometió llevarlos a la cima. Y lo estaba logrando.

—¡Son brillantes! —exclama sonriendo, pero mira con confusión las caras largas —¿Qué pasó ahora?

—¡Horrible suena! Eso pasa —Gemini hace un gesto tierno.

Pond suspira desactivando el amplificador, deja su bajo a un lado y se peina el cabello hecho un desastre. Tiene ojeras oscuras y su piel se siente sucia. Necesita un baño urgente.

—Suena tan básico, nada especial para mañana —dice Joong estresado.

Como el líder del grupo, Joong sentía que debía cargar con la responsabilidad de que todo salga perfecto. No era así, pero siempre fue terco.

Jan toma su celular y saca fotos para publicar en sus redes.

—"Mañana estaremos en el Club Karma" —susurra mientras escribe, si su canción era una mierda al menos necesitaban tener buen público.

Jan es la persona que alegra al grupo y su público, y algunas veces era la cabeza sensata de Ekilam. El ser la única mujer tenía su poder.

—No es verdad, chicos, suena fantástico —agrega Tay. Se sienta al lado de Gemini y le acaricia el pelo. El menor se apoya en el pecho de Tay como un gatito en busca de caricias.

Gemini es el menor del grupo, el mimado por todos, puede verse como el más despreocupado pero el que más se sobre exige. Tay es quién le calma los humos y lo devuelve a la tierra.