And I tried to hold her
But it didn't really last long
And she's getting older
I guess she's gotta cut her blue hair off
Crossover de Percy Jackson y Harry Potter
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La mañana siguiente amaneció muy brillante y fría. El Gran Comedor estaba inundado por el delicioso aroma de las salchichas fritas y las alegres charlas de todos, que esperaban un buen partido de quidditch.
-Tienes que comer algo para el desayuno.
-No quiero nada.
-Aunque sea un pedazo de tostada -suplicó Hermione.
Kiara tomó una de la bandeja que había frente a ellos y comenzó a untarla con mermelada de durazno. Luego la posó con una sonrisa en el plato de su amigo.
-No tengo hambre.
La rubia bufó, Harry se sentía muy mal. En cualquier momento echaría a andar hacia el terreno de juego.
-Harry, necesitas fuerza -dijo Seamus Finnigan-. Los únicos que el otro equipo marca son los buscadores.
Kiara quiso golpearse la frente, ¿por qué le diría eso?
-Gracias, Seamus -respondió Harry sarcásticamente, observando cómo llenaba de salsa de tomate sus salchichas.
-Harry,- dijo la niña rubia con el ceño fruncido.- si no comes te vas a terminar desmayando. Y créeme, no quieres desmayarte mientras estás en una escoba a varios metros sobre el suelo.
El niño bufó y le dió una pequeña mordida a la tostada que le dió su amiga, quien sonrió satisfecha. Harry luego comenzó a empujar las salchichas bañadas en salsa de tomate con su tenedor, sintiendo su estómago cerrado.
-Aun creo que no tiene sentido no tener una red de contención en el campo de Quidditch. Alguien podría lastimarse.- comentó la rubia, antes de cruzarse de brazos sobre la mesa con el ceño fruncido.
-Le quitaría la emoción al juego.- le respondió Ron con obviedad, Kiara rodó los ojos antes de comentar.
-Claro, es tan emocionante saber que en cualquier momento te puedes caer y romperte el cuello.
Apenas salieron esas palabras de su boca, la niña esbozó una mueca culpable.
-No es como que te vaya a pasar a tí, Harry. Claro que no.
-Claro, Kye.- El chico empujó su plato lejos de él, la niña frunció el ceño.- Lo que digas.
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