𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟕

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Pasé todo lo que quedaba a solas con Potter, me comentó que su padrino estaba escondido por ahí porque le quieren muerto y los mortifagos le buscan

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Pasé todo lo que quedaba a solas con Potter, me comentó que su padrino estaba escondido por ahí porque le quieren muerto y los mortifagos le buscan. Intenté saber donde pero el no quería hablar de eso ya que cambiaba la conversación.

El me preguntó por mi madre y yo no estaba muy cómoda haciéndolo pero le hablé de ella y de mi trastorno desde entonces todo con tal de conseguir lo que necesito, acercarme a el.

A la mañana siguiente no bajé a desayunar, hablar de mi madre me ponia mal y hacia que se me quitase la poca hambre que tenía de normal, tampoco fui a clases ya que no tenia mucho ánimo y sobretodo cuando se acerca la fecha de su fallecimiento...

Miré el reloj, era por la tarde, decidí bajar un rato a la sala común y creo que los chicos sentados notaron pasos bajar.

—Melissa, ¿Estas bien? —me preguntó Blaise mirándome preocupado

—Si solo me enfermé.—me senté junto a él.

—¿Y esas ojeras?—mierda no me había maquillado y Blaise lo notó.

—No dormí bien.—noté una mirada penetrándome, giré la cabeza y era Matheo, tenia cara de intentar descifrar algo.

—Pareces sacada de una película de terror.—me dijo él.

—Si quieres discutir hazlo con tu hermano, no tengo ánimos.

—Tengo una idea.— dijo un chico de ahí.

—No.—dijeron Malfoy, Zabini y los hermanos a la vez

—Aun no dije nada...

—Tus ideas nunca son buenas.—aclaró Tom leyendo un libro de Historia de la magia igual que el que yo me estaba leyendo. Notó que lo miré y el levantó su vista por encima del libro solo dejando ver sus ojos.

—Mi idea es que vayamos fuera y...

—No.—le dije yo —Prefiero un crucio.

—Hagámoslo. —Tom cerró su libro y se puso en pie.

—¿La vas a lanzar un Crucio?—preguntó Blaise

—¿Que? No, no. Digo lo de salir.

—¿Tom Riddle aceptando una idea buena de Theo y queriendo salir?— preguntó el hermano —Mañana se acaba el mundo.

—Id vosotros, yo tengo cosas que hacer. —me levanté y Blaise me cogió del brazo

—Porfa Melissa. —me puso cara de pena.

—Blaise no soy de esas cosas, no me gustan.

—Venga te lo pasarás bien, te lo prometo. —me dijo el chico llamado Theo.

—Si voy quiero estar en la otra esquina a estos energumenos, no estoy para aguantar sus tonterías hoy y menos de un gracioso que es todo menos un caballero. —miré directamente a Matheo y el por hacer la gracia se giró hacia atrás.

—Yo no veo a nadie. —yo le alcé una ceja. —Oh vamos Grindelwald, somos compañeros.—cuando dijo eso Tom lo mató y resucitó para volver a matarlo 5 veces. —Ya sabes a Snape se le ocurrio la idea de ponernos juntos, no nos podemos llevar mal.

—Pues querido mio, ya vas con mal pie.—me puse entre Blaise y el otro chico.

—¿No esperamos a Draco?

—¿Malfoy también? Tiene que ser broma.

—¿Te llevas bien con alguien?.—me preguntó Theo.

—Si, con Blaise y con Potter.

—Creo que he oído mal.

—Ya te lo explicaremos Nott.—dijo Tom.

—¿Explicar el que? —dijo Blaise.

—El como me vas a comer los huevos por debajo del culo. Que le den a Draco vamonos.—añadió Matheo.

Nos fuimos a un pueblo de al lado de la escuela del cual no me acuerdo del nombre, visitamos varios sitios y acabamos en Las Tres Escobas.

—Voy a pedir.—Blaise fue a la barra.

—No no, voy yo que pides lo que te da la gana.—aclaró Matheo

—Si hombre, a saber que piden. Preciosa, ¿Qué quieres?.—me dijo Nott

—Una cerveza de mantequilla.

El me asistió y se fue detrás de los otros dos quedándonos Tom y yo solos.

—Pide algo de comer, ayer no cenaste y hoy no has ido a desayunar.

—Estoy mala, ya lo dije antes.

—Te oí Melissa, te he oido hablando con Potter. —me puse palida. —¿Crees que no se que no has dormido por qué tu madre está muerta y aun no lo superas del todo? ¿Crees que no se que no comes por qué te da angustia y no tienes hambre desde que ella no está?

—Tu no sabes nada de mi vida Riddle, nada. —estaba conteniendo las lágrimas, los Grindelwald no lloran.

—Voy a pedirte algo de comer y me da igual lo que pienses. No puedes estar sin comer, te volveras debil y flaquearas en la misión.

Cuando ellos volvieron el se levantó a por algo de comer y me lo puso enfrente y no me quitó el ojo de encima hasta que me lo comí.

𝑽𝒆𝒏𝒅𝒆𝒕𝒕𝒂 𝑮𝒓𝒊𝒏𝒅𝒆𝒍𝒘𝒂𝒍𝒅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora