Ella (Sesshomaru Y Rin)

Capítulo 21 [+18]

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Kaede finalmente se dirigió a su habitación a tomar un descanso, mientras tanto Rin permanecía afuera de la habitación del Señor Sesshomaru tomando fuerzas para golpear su puerta. "¿Lo hago o no lo hago?" Esta pregunta se repitió en la cabeza de Rin fácilmente unas 15 veces en menos de 2 minutos hasta que una voz interrumpió sus pensamientos. Nuevamente esa voz que a ella tanto le gustaba.

-Rin, ¿Qué haces aquí? - Preguntó un ambarino curioso mientras se agachaba unos cuantos centímetros para estar en la altura de Rin.

Oh rayos. ¿Y ahora a dónde de me meto?

-Señor Sesshomaru, lo siento mucho por la molestia. Quería consultarle si...¡Si quería un poco de sopa! - dijo Rin inventando una excusa rápidamente, tal vez pasaba desapercibida.

-¿Ah sí?, y dónde esta la sopa? - Exclamó el peliblanco levantando una ceja, no le creía ni un poquito.

Mierda, me descubrió. Pensó Rin mientras bajaba aún más la cabeza por la vergüenza. Se lleno de valor, levantó sus ojos hacia el mayor tomando un poco de aire por aquel atrevimiento y exclamó;

-Señor Sesshomaru, ¿Puedo hablar con usted? Es muy importante. - Dijo mirándolo en tono de súplica. La azabache esperaba una respuesta pero sin embargo Sesshomaru no emitió ninguna palabra pero hizo un gesto con el brazo para que Rin entrara a su alcoba.

Rin entro sigilosamente pensando en que debía decirle, no podía soltarle aún la verdad sin saber que estaba fuera de riesgo. Sí Naraku se llegaba a enterar ella y todos estarían fritos, por eso primero debía aclararle como se sentía.

Sesshomaru se acomodó al borde de su cama e hizo señas con la mano para que Rin se sentará al lado de él. Ella siguió sus instrucciones algo tímida todavía por la situación. Se sentó frente a él, respiró profundo ya que estaba preparada para aceptar su rechazo nuevamente.

-Señor Sesshomaru, le quiero ser sincera por más que esta conversación no termine bien. - El peliblanco hizo una expresión mínima de confusión y la azabache volvió para aclarar. - Lo que me refiero es que usted la mayoría de las veces me rechaza, y está bien lo entiendo... Sé qué nunca se fijaría en mí de manera romántica o hasta sentir atracción por mí. - Sesshomaru permaneció callado, con su expresión natural de indiferencia pero por dentro sintió pena, el sabía que la había hecho sentir de esa forma.

Rin siguió expresandose al ver que la figura masculina en frente de ella no emitia sonido alguno.

-Sé que no soy hermosa como las mujeres que usted ha estado. - Hizo una pausa para tragar en seco mientras se acomodaba ligeramente un mechón de su cabello. - Sé que tampoco lo he besado bien, pero quería decirle al menos por mi parte y para que quede claro que mi beso con Kohaku no significó nada. - Rin se sonrojo notoriamente mientras hacía un jueguito con sus manos como consecuencia de los nervios, ella estaba intentando asimilar lo que estaba haciendo y prosiguió para decirle unas últimas palabras. -Sé que no tengo que darle explicaciones porque no éramos ni somos nada. Aunque me gustaría, pensó Rin. Pero como semanas atrás habíamos tenido una leve discusión con eso, quería aclararselo. Sé que usted me ha besado para jugar conmigo pero quiero pedirle por favor que no lastime mis sentimientos y sí es que en realidad siente algo por más diminuto que sea que me lo diga y yo lo entenderé - Terminó de hablar ya con los ojos llorosos.

Había pasado un minuto silencioso y algo incómodo luego de Rin terminó de hablar pero sin embargo Sesshomaru no emitió ni una palabra. Rin se levantó algo decepcionada de la cama del mismo. Antes de aclararle lo de Naraku, ella misma quería aclarar sus sentimientos y ya había cumplido uno de sus su cometidos. La pequeña mujer estaba dispuesta a irse hasta que Sesshomaru, sentado desde su cama tomó su mano con extrema delicadeza y la acomodó en el espacio libre de sus pierna, hizo una leve pausa hasta que comenzó a hablar.