Derríbame | JINX

Capítulo 18| Como todo empezó.

Usualmente los Alfas dominantes siempre están en sintonía con sus amos, sus dueños, sus compañeros. Tratan de entenderse entre ellos para armonizar su relación. Su fuerza proviene desde adentro, como un núcleo de vitalidad, entre más unido sea su lazo más poderoso se vuelven.

En la adolescencia conoces a tu compañero, tu huésped, tu otra mitad. Es algo por lo que inevitablemente todos pasan, por supuesto para Jaekyung no era la excepción. Todos sus compañeros de secundaria rezaban por poseer lobos fuertes e imponentes, todos anhelaban manifestarse como Alfas. Por supuesto, era imposible que en un salón de clases todos corrieran con la misma suerte, la mitad resultaron ser Omegas mientras la otra mitad eran betas. El único Alfa fue Joo Jaekyung, un Alfa dominante.

Cuando se hizo sus estudios correspondientes con el médico, dicho dedujo que su "Lobo interior" era muy tímido por lo que debía darle tiempo para que se comunicara con él, años más tarde el mismo Doctor le dijo que había nacido sin un lobo interior dado que jamás pudo escucharlo o sentirlo, era como si estuviera hueco por dentro, como un enorme vacío. No había nada ahí. No le incomodaba en lo absoluto. Pero por supuesto jamás se lo contó a nadie más que a su entrenador.

Jaekyung creció viendo como todos sus compañeros de la secundaria hablaban sobre su convivencia con sus lobos. Sus conversaciones variaban dependiendo de cuan armoniosa era la relación. Una vez escuchó a un Omega quejarse dado que su "lobo" era demasiado dramático, exijia afecto de Alfas y por eso lo ponía en situaciones peligrosas con hombres desconocidos. En otra ocasión escuchó a un Beta quejarse porque su lobo era demasiado rebelde por lo que era muy difícil de controlar. Cientos de historias acabaron enterradas en lo profundo de las memorias de Joo. Todas sobre cuan complicado era cuidar de su huésped. Fue entonces que Joo pensó que era afortunado por no tener problemas como esos, ya que no poseía un lobo.

Pero en realidad, sí existía, solamente que su Alfa lo odiaba aunque él en ese tiempo no lo sabía. El carácter de su lobo era indomable e imponente. No estaba interesado en compartir su hábil fuerza con alguien como Joo Jaekyung.
¿Qué había de malo en él como para despreciarlo como su dueño? ¡Nada! No tenía absolutamente nada de malo, era la clase de hombre que cualquiera Alfa rogaría por poseer. No era como esos dueños molestos, engreídos o con mala higiene. La única desventaja suya era su mal carácter, explotaba con las más mínimas cosas.

Sencillamente su Alfa lo odiaba, no existía una razón en especifica, era el mero instinto, la naturaleza salvaje de no querer estar encerrado en el cuerpo de un humano. No quería formar parte de eso.

Por supuesto su Alfa era espectador de todas las malas decisiones que su dueño tomaba como por ejemplo tener sexo con betas insípidos. En los ojos del lobo nadie era demasiado interesante, todos poseían el mismo aroma de feromonas asquerosas, todos parecían ser la copia barata de otro beta, eran como clones, unos del montón.

En un mundo tan monótono como aburrido, comenzó a cobrar color en el instante que apareció Kim Dan como el nuevo Fisioterapeuta. Había algo en ese joven que le llamaba la atención, poseía un olor distinto, no olía a perro mojado como los lobos, era un aroma fresco e interesante.

Un día, después de que una de las tantas competencias de su dueño llegara a su fin, todo el team black decidió rentar cabañas para dormir. Cuando la noche llegó, su lobo interior decidió salir tal como lo hacía cada vez que su dueño dormía. ¿Creía que todos estos años se quedaba encerrado? Por supuesto que no, salía con frecuencia, pero Joo jamás lo recordaba.

El lobo salió de la cabaña que daba hacía el bosque con tintes azules y oscuros, pintando una hermoso cuadro melancólico. Lo primero que vio fue a una ardilla arrebatándole una cosita plateada de las patitas de un Hámster.