Bitácora %&#^@×: Verdades Falsas

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— ¿Es todo? —

— Sí, gracias, pollita—

Nos sonreímos, y le di un beso para luego revisar debajo del algodón que puse para cubrir el punto de la toma de sangre que hice.

— Ten presionado el brazo así un rato—

Acaricié su mejilla y llevé la muestra de sangre junto a las otras en las cuales también había un par mías.

— ¿Cuándo irás al laboratorio? —

— No lo sé... mamá está ahí en estas fechas, así que debo esperar un poco —

— No has pensado en decirle todo, así como me lo contaste a mí—

— Es complicado, nunca lo he hecho y no sé cómo reaccionará, bueno, aunque incluso tú reaccionas diferente—

La escuché reír, y una vez guardé la pequeña hielera con las muestras, me acerqué a ella para darle un corto beso con el cual tomó mi rostro y me miró con las únicas miradas que me dedica, de amor.

— No es fácil de procesar, pero no estaría mal que lo intentaras... Siempre me hablas de tu mamá como la mujer más inteligente que conoces y sobre todo como tu inspiración... Tal vez sea la ayuda que requieres.

— No lo sé, amor...—

— Sé que tienes dudas y no quieres admitir que necesitas ayuda, pero tal vez sea la respuesta que buscas.

— Sé que necesito ayuda, pero en mi situación es difícil conseguirla.

Juntamos nuestras frentes y cerramos los ojos.

— Estaré para ti siempre que pueda... sé que no es fácil—

— Tú eres todo lo que necesito... —

— Sabes que no es así... —

— Quién sabe, pero sí sé que te deseo a mi lado —

— Yo también... —

Nos separamos, y la miré detenidamente... odio perderla y que cada vez sea más doloroso.

— Será mejor que me vaya —

— ¿No quieres pasar la noche conmigo? – Me pidió, tomando mi mano a lo cual besé sus nudillos.

— Solo dormir —

— Solo dormir — Repitió.

No me gustaría que piense que la uso solo pasó una vez y no se repetirá... Aún recuerdo cuando le conté por primera vez todo lo que pasaba y pensó que volvía a ella porque era lo que se me hacía más fácil.

Desde entonces, temo tocarla y que piense que solo lo hago por placer, sin sentimientos de por medio, cuando cada beso y caricia quieren gritar que la amo, aunque para ella le parezca un poco rápida esa forma de amar.

[...]

— Duerme... es muy temprano —

— Tengo que seguir investigando —

Tomé mi rostro por las mejillas para que pudiera verla.

— También debes descansar —

Dejé el teléfono a un lado y la acuné en mis brazos.

— Ya lo hice... tu calor me da mucha paz para descansar como es debido —

No dijo nada, pero se abrazó más a mí... Dormir con Lisa abrazada mientras le doy mimos o ella me los da es lo único que me evita rendirme por imaginar en que podría pasar si lo logro.

Pandemic Reset Jenlisa G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora