Capitulo 17

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*una semana después*

Sungmin se encontraba en la cocina, tratando de hacer unas galletas de avena y chocolate para Leeteuk, ya que eran sus favoritas, con la intención de pedir disculpas, otra vez, por lo sucedido el día de la mudanza. Habia pasado casi una semana entera y la figura materna no le dirigía la palabra al pequeño rubio, ya que, aunque haya podido curarle la herida a Kangin, dejó una pequeña cicatriz en forma de rayo justo donde va su corazón, y no podía evitar culpar al pequeño por eso. Sungmin se sentía extremadamente herido, creía que Leeteuk ya no lo queria, por eso intentaba ganarse su cariño de nuevo, y mas aun después de lo que sucedió tres días antes.

*Flashback*

Leeteuk venia saliendo de su nueva habitación, la cual se encontraba en una casita aparte. Como asi?. Fácil. La nueva casa en el campo, constituía a una enorme mansión de dos pisos, con una estructura de casona antigua, de un color beige claro, y puertas de caoba negra. Habia una alberca en el patio, el cual era de una gran extensión dando a la vista lo que parecía el borde de un bosque, y cerca de ese borde habia otra, un poco mas pequeña, estilo cabaña de verano, donde Leeteuk y Kangin decidieron quedarse para darles a sus hijos un poco de espacio, y también porque no habia mas cuartos en la casa mayor.

Leeteuk, caminaba sin mirar por donde iba, pensativo, llevando sobre sus brazos unas cobijas sucias y una cubeta con pañitos utilizados. Al parecer Kangin se debilitó por el ataque de las sombras dado que el impacto fue directo al pecho, ocasionando que se le fuera todo el aire y acto seguido perdiera el conocimiento. Sungmin pudo curar la zona de impacto, y lograr que Kangin despertar, pero el ataque lo dejo algo débil, provocando que le diera algo de fiebre, y por eso se encontraba postrado en cama por ordenes de un exigente pero preocupado Leeteuk.

Por estar en las nubes pensando en que prepararle de almuerzo a su pareja, fue que no vio como un pequeño rubio, bajaba corriendo la colina con un ramo de flores silvestres que habia recogido cerca de la alberca para llevárselas a su figura paterna esperando que lo alegraran y se mejorara mas rápido.

Sin poder detenerse a tiempo, Sungmin chocó de frente con Leeteuk, logrando que este perdiera el equilibrio totalmente y se fuera cuesta abajo rodando, con cobijas y todo hasta llegar al inicio de la pequeña colina, que aunque por mas pequeña que fuera, era algo empinada y la bajada era resbaladiza.

Al terminar de rodar y soltar un gemido de sorpresa, Leeteuk se levantó rápidamente para ver que fue lo que lo tumbó y alli cerca de él, se encontraba Sungmin sobándose las pompas porque él también habia rodado colina abajo, pero cayendo sentando al final, regando las flores por todos lados, algunos petalos en su cabeza y otros en la de Leeteuk.

-"Por Shissus Sungmin! Podrías tener mas cuidado la próxima vez?? O es que también quieres matarme??"- le espetó un molesto Leeteuk, al pobre rubio que lo miraba con ojos cristalinos de la tristeza.

Agachando la cabeza, se dispuso a levantarse y recoger las pocas flores que sobrevivieron la caída, y con un tonito de voz de niño chiquito le susurró -"Lo siento omm... eh.. Leeteuk... solo queria entregarle estas flores que consegui a Appa para que se alegrara y se mejorara pronto... no te vi subir y cuando lo hice fue tarde para poder frenar"- dicho esto, bajó la mirada, aguantando las ganas de llorar, y tampoco queriendo mostrarle su carita de vergüenza a Leeteuk.

Leeteuk solo meneo la cabeza, recogió las mantas que habia tirado durante la bajada. -"Dejalas donde están... es posible que el polen le de alergia a Kangin... ya se está recuperando de la fiebre y no necesita que vengas y lo enfermes mas"- y con eso, emprendió la subida de nuevo, sin darse cuenta del pobre rubio dejando caer las flores y llorando como si hubiera perdido lo mas preciado de su vida...

Legión de Ángeles. (Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora