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.•°Estela pov's°•.

Sentía los nervios recorrer todo mi cuerpo, odiaba los segundos de suspensión que todos hacían antes de anunciar alguna cosa, en este caso la ganadora de nuestro combate.

-YA DILO MAMONA.- Alcance a escuchar a mis amigos desde la parte de abajo del ring.

El árbitro sostenía mi brazo al igual que el de Marina, era cuestión de segundos para saber el veredicto final.
Mi vista quedó en un punto fijo del ring, no sabia dónde mirar o si sonreír o no, aún tenia mi respiración agitada y era lo que intentaba controlar.

-¡En la esquina.... EN LA ESQUINA ROJA ESTELAA!- Solté el aire que no sabia que estaba reteniendo, el árbitro subió mi brazo indicando mi victoria.

Cerré mis ojos cuando sentí mis lágrimas amenazaron con caer, los brazos de mi novio me rodearon por los hombros.- Te lo mereces reina, eres una pinche fiera cabrona.- adrenalina pura recorría mi cuerpo, sentí un impulso que traté de controlar ya que estábamos frente a miles de personas, sin mencionar las personas me miraban en directo. Pero cuando menos me di cuenta ya había juntado nuestros labios por poco tiempo.

Escuche como la oleada de gente grito ante esto así que me separe de el y regrese junto a Ari.
Miré a Abi quien me sonreía, le entregaron el cinturón a ella para que me lo colocara.
Accedí a que Ronny me cargara por segunda vez en sus hombros pero ahora con una victoria de por medio. Y al parecer con una confirmación de nuestra relación.

Al tocar piso nuevamente los brazos de Samantha rodeandome mientras me felicitaba numerosas veces. Seguida de Osvaldo quién hizo prácticamente lo mismo.

-Estela ¿quisieras decir algunas palabras?- Cris me entrego el micrófono.

-Si claro que hay cosas que hacer y agradecer, nada de esto hubiera sido posible sin el apoyo de mis personas más cercanas, mis amigos, mi familia y sobretodo sin mi entrenador.- Sonreí cuando este me mando un beso.- Pero yo quisiera dedicarle esta victoria a una persona que me apoyo desde el primer día, esta persona añoraba con venir a verme este día pero lamentablemente el se fue antes de que esto ocurriese, así que, Abuelito donde quiera que estés.-Levante el cinturón.- Esto es tuyo.

Fue inevitable no soltar una que otra lágrima, estaba apunto se regresar el micrófono cuando reaccione. Espere a que la gente se calmara y volví a hablar.

-Un placer regresarle la victoria a mi México, Marina tiene potencial no lo voy a negar, si da buena pelea pero te lo dije corazón. Conmigo los abrazos no funcionan.- Entregue el micrófono y me acerque a mis amigos quienes tenían cara divertida.

-¿Sabes la funa que te va a caer mujer?

-¿Si? Mmmm nimodo, vamonos ya, necesito darme una ducha urgente que me voy a empedar a tal punto de no recordar nada el día de mañana.

Abandonamos el ring dirigiéndonos hacia el camerino, me dedicaba a sonreír y mandar besos a las personas que estaban en los alrededores.
Valdo y Samy decidieron ir con los demás ya que querían ver los siguientes artistas, Ronny me acompaño para guardar las cosas que habíamos ocupado. Este entro de tras de mi y cerró la puerta, me quite el cinturón y lo dejé en la mesa para comenzar a deshacer mis trenzas. A través del espejo pude ver como se acerco a mi, me abrazo por la cintura y puso su cabeza en el espacio que había entre mi hombro y mi cuello.

-¿Te eh dicho que eres increíble?- Susurro en mi oído mientras daba caricias con su mano en mi abdomen.

Hice un sonido de negación con mi garganta causando que su agarre se intensificará.

-¿No? Que maleducado soy.- Sus manos dejaron de abrazarme y se aferraron a mi cintura.- Déjame compensarte.

Comenzó a dejar pequeños besos a lo largo de mi cuello, hice mi cabeza aún lado para darle más accesibilidad a este.
El camerino se encontraba en un silencio infernal, solo se escuchaban nuestras respiraciones que poco a poco se iban acelerando más.

°•.¹²³ ᴅɪᴀꜱ ᴘᴀʀᴀ ᴇɴᴀᴍᴏʀᴀʀᴛᴇ°•. "ʀᴏɴɴʏ"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora