Hay una pesadilla recurrente entre la población, utilizada en series y películas con frecuencia debido a su recurrencia: estar en un auditorio lleno de gente completamente desnudo. Sin embargo, al abrir los ojos aquella mañana, lo primero que pensó Taehyung es que debía ser sustituida por otra peor. Despertarse en la cama de su jefe millonario, con una ropa interior que no recordaba haberse puesto él mismo, con el pelo de cartón piedra por el sudor de la noche anterior, y no siendo capaz de encontrar el resto de su ropa. La situación solo podía empeorar si en ese momento aparecía una bruja malvada y activaba una catapulta gigante para lanzarle a un foso de cocodrilos hambrientos.
Envuelto en la sábana como si de una túnica griega se tratase, pero con cuidado de no arrastrarla por el suelo por miedo a que el señor Jeon le hiciese pagarla dejándole sin sueldo durante un tiempo indeterminado, Taehyung salió de la habitación, siguiendo los ruidos que sonaban en la planta baja.
El señor Jeon estaba vestido solo con una camiseta de algodón y su ropa interior, moviendo la cabeza discretamente al ritmo de la música de Le Sserafim que sonaba en su salón mientras cocinaba algo en los fuegos. A pesar de haber intentado ser sigiloso, el suave ruido de las pisadas del secretario debió alertarle de que se acercaba, porque cuando estaba a unos pocos pasos, el hombre se dio la vuelta y le dedicó una sonrisa.
— Buenos días, Taehyung, ¿cómo has dormido? —preguntó el señor Jeon.
— Lo siento, señor, no me di cuenta de que me había quedado dormido, le prometo que no volverá a pasar...
— No importa, entiendo que estuvieses completamente exhausto, te portaste muy, muy bien...—respondió el hombre casi con voz de admiración—No esperaba que aguantases tanto. ¿Mereció la pena?
— Por supuesto, señor, pero eso no justifica que...
— No le de tanta importancia—reafirmó el CEO, revolviendo distraídamente el revuelto de huevo de la sartén—¿Cómo te gustan los huevos?
Taehyung mordió sus labios para suprimir la sonrisa que amenazaba con aparecer en su cara por la tentación de responderle "golpeándome en la barbilla". No podía decirle eso a su jefe bajo ningún concepto. Sin embargo, debió de tardar unos segundos más de lo debido en responderle, porque una sonrisa irónica apareció en los labios del señor Jeon.
— Sé lo que estás pensando, pero no creo que pudieses soportarlo todavía después de lo de anoche.
— No, yo, a ver...—empezó a tartamudear Taehyung al sentirse expuesto, sintiendo cómo sus mejillas se teñían de carmesí—No hace falta que me haga el desayuno, solo dígame donde está mi ropa y me marcharé.
— Me temo que eso no va a ser posible, Taehyung. Está en la lavadora. En un par de horas estará lista, pero hasta entonces... ¿te parecen bien los huevos revueltos?
— Sí, está perfecto señor—respondió Taehyung, queriendo que se le tragase la tierra — ¿Le he molestado mucho al dormir?
— En absoluto, he dormido en el sofá —respondió el CEO con total naturalidad.
— ¡No! ¡Pero cómo va a dormir en el sofá estando en su propia casa! —exclamó Taehyung, escandalizado.
— Es sencillo, tú no consentiste a que durmiese a tu lado, así que por respeto no lo hice. No quería que te despertases con alguien al lado sin ser tu deseo.
En ese momento, Taehyung deseó desesperadamente que se le tragase la tierra. No solo se había quedado dormido en la cama de su jefe, sino que ni siquiera le había dejado dormir a él en ella. Y para colmo, el hombre le había hecho el desayuno y la colada.
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Kim's secret [TERMINADA]
FanfictionJeon Jungkook es un hombre arrogante e insufrible, famoso por ser uno de los más implacables CEOs de Korea del Sur. Todo el mundo sabe que solo tiene una debilidad: las cerezas. Pero desde hace unos meses, eso no es totalmente cierto. Ahora, Jeon Ju...