Capítulo 9-Distancia

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Cuando Taehyung abrió los ojos a la mañana siguiente, tardó unos segundos en recordar dónde estaba. El lado de la cama donde Jungkook había dormido estaba ya frío desde hacía tiempo, lo cual le hizo darse cuenta de que su jefe se habría ido hace tiempo. Al darse cuenta de ese detalle, sintió una presión en su pecho sin entender muy bien por qué, como si su alma echase de menos su presencia más allá de lo carnal.

Intentando no pensar demasiado en ello, se levantó de la cama y se preparó para ir a trabajar. De puntillas, bajó las escaleras a la planta baja del apartamento, como si fuese a molestar a las propias tablas del suelo con su sola presencia. Se sentía en aquel momento como un intruso, tan ajeno al entorno como un pingüino en el desierto del Sáhara.

Tenía la intención de salir lo antes posible del apartamento, en parte avergonzado por no haberse dado cuenta ni siquiera de cuando el CEO se había marchado. Pero entonces, una bandeja sobre la mesa del comedor llamó su atención.

"Buenos días Taehyung.

Perdóname por no haberte esperado para ir a la oficina. Tenía que dejar solucionadas unas cuantas cosas para mi viaje de esta tarde a Japón. He pedido un desayuno para ti a modo de disculpa. Espero que la mermelada de fresa que vas a poner en tu tostada (Es tu favorita, ¿verdad?) esté tan dulce como tú mientras dormías.

Te veo en la oficina.

JK"

Taehyung necesitó unos instantes para procesar lo que decía la nota. Primero, el hecho de que viese la necesidad de disculparse cuando debería haber sido él quien lo hiciese por forzarle a dejarle durmiendo solo en su propio apartamento. Después, el hecho de que no solo le hubiese encargado un desayuno, sino que supiese hasta el tipo de mermelada que le gustaba. Y por último, aquel último cumplido que hizo que su corazón se acelerase por la emoción.

Con un extraño baile en su estómago que atribuyó al estrés y el hambre, se sentó a disfrutar de aquel inesperado banquete. El pan tostado tenía semillas y se notaba que había sido hecho con masa madre y harina de buena calidad. La mermelada de fresas y menta fresca era sabrosa y con el punto justo de acidez y dulzor para no restarle protagonismo a la fruta. El croissant tenía un delicioso sabor a mantequilla y aún conservaba la ligera tibieza del horno donde había sido cocinado. El zumo de naranja era claramente exprimido. Incluso el té se notaba que era de una gran calidad. ¿Así sería cómo comía el 1%?

Tras terminar de desayunar, trató de dejar todo recogido y limpio para intentar hacer pasar su estancia lo más desapercibida posible, y por fin entró en el ascensor para bajar a la planta baja. Con pasos fingidamente seguros, pasó por delante del portero, un hombre mayor de pelo blanco y ojos inquisitivos.

— Disculpe. ¿Es usted el señor Kim, el invitado del señor Jeon? —preguntó el hombre al verle pasar.

— Sí, soy yo. ¿Ocurre algo?

— El señor Jeon ha enviado a su chófer personal para recogerle.

— ¿Perdón? —preguntó con incredulidad Taehyung.

— Ya le está esperando en la puerta. ¿Desea algo más, señor?

— N... no—titubeó con estupefacción Taehyung—Muchas gracias.

— Solo es mi trabajo, señor—respondió el hombre.

Completamente desconcertado, Taehyung se subió al coche que el portero le indicó, y tras un breve saludo, el conductor comenzó su trayecto hacia la empresa sin necesidad de que Taehyung tuviese que decir nada. Tras bajarse del vehículo en el aparcamiento del edificio, se alejó a largas zancadas para evitar ser visto por otros trabajadores. Sin embargo, el señor Jeon se había encargado de que su plaza de aparcamiento estuviese en una zona lo suficientemente aislada como para que la probabilidad de ser visto fuese nula.

Kim's secret [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora