en la tarde un de dia como cualquier otro me enccontraba caminando por la calle sin problemas en la vida cuando de repende me llegan un mensaje de un tal "dios" un raro nombre veamos que pasa y que me dira
Bra, la hija de Vegeta y Bulma, se encontraba en una ciudad cuando de repente sintió un estremecimiento en el suelo. Los temblores no eran causados por la naturaleza; algo más estaba en juego. Bra, alerta y lista para la acción, se elevó en el aire para evaluar la situación.
Qi Xing Long, el dragón oscuro de siete estrellas, emergió de entre los edificios, revelando su imponente presencia. Su figura monstruosa resonaba con la furia de un deseo mal concebido.
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Qi Xing Long: (gruñendo) ¡Soy Qi Xing Long, el dragón de siete estrellas! He nacido de los deseos que han alterado el equilibrio del universo.
Bra, sin titubear, se transformó en Super Saiyan 2, desatando una poderosa aura dorada que rodeaba su figura. Estaba decidida a enfrentar a Qi Xing Long y evitar que su malevolencia causara más estragos en la ciudad.
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Bra: (con determinación) Tu nacimiento no justifica la destrucción que estás causando. ¡Me aseguraré de que pagues por cada vida que hayas afectado!
La batalla comenzó con un intercambio de golpes y ráfagas de energía entre Bra y Qi Xing Long. Los edificios temblaban mientras la intensidad de la confrontación crecía. Bra, utilizando su velocidad y agilidad como Super Saiyan 2, logró esquivar los ataques del dragón oscuro y contraatacar con su propio arsenal de habilidades.
Qi Xing Long, furioso por la resistencia de Bra, desencadenó su poder oscuro en un intento de abrumarla. Sin embargo, Bra no se amedrentó y respondió con un ataque Big Bang, concentrando una esfera de energía brillante en sus manos antes de lanzarla con fuerza contra Qi Xing Long.
El ataque impactó con precisión, envolviendo a Qi Xing Long en una explosión de luz. Bra, sintiendo que la amenaza estaba contenida, descendió hacia el lugar del impacto.
Bra: (recogiendo la esfera de siete estrellas) No permitiré que tus deseos distorsionen la paz de la Tierra.
Qi Xing Long, ahora desvanecido, dejó solo la esfera de siete estrellas como testigo de su derrota. Bra, con determinación en sus ojos, guardó la esfera y se elevó de nuevo en el cielo. Sabía que la batalla contra los dragones oscuros aún no había terminado, y cada victoria era esencial para proteger el futuro de la Tierra.
