Sigues aquí

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Todavía sigues muy dentro de mí, en el fondo del baúl de mis recuerdos. Aquí te sigo sintiendo como una espina que no he logrado sacar; como una piedra que no puedo patear y me pregunto, ¿cómo voy a olvidarte? Si por las noches sueño con besarte y en cada día vuelvo a recordarte.

Sí, aún sigues aquí, muy dentro de mí.

- Es temporal – humedece sus labios – resuelves el caso y regresas a tu bendita burbuja de protección.

Se repitió una y otra vez, viéndose al espejo, mientras se duchaba. No entendía desde cuando se había convertido tan pesimista; se estaba convirtiendo en lo que una vez juró destruir, en una cobarde.

No tenía nada que perder, ella no fue la causante de su propio dolor, había un culpable y esta sería la oportunidad de cobrarle de alguna manera todo el daño que le había ocasionado.

Esteban Lombardo le destrozó la vida y el hecho de que ahora fuera un sospechoso de asesinato debería alegrarle, pero no era así. Ni siquiera sabía que era lo que le causaba más conmoción, si el supuesto crimen o el hecho de que volvería a verlo.

El caso que se estaba investigando era el asesinato de Helena Salinas, el cual llegó a las manos de la Unidad de Análisis pues había varias inconsistencias en la investigación; se estuvo manejando como suicidio, sin embargo, una de las principales razones por las cuales no concordaba el veredicto con la autopsia, era que la bala impacto en la sien derecha y la mujer era zurda.

¿Quién era Esteban? ¿por qué era sospechoso?

Esteban Lombardo es un empresario reconocido a nivel mundial, dueño y fundador de Lom-Ent, la empresa de entretenimiento número uno en México, además de eso, también era hijo de Hernán Lombardo, uno de los candidatos a la presidencia del país mexicano. Es por eso la importancia de su participación en el caso, pues había bienes patrimoniales de por medio y un posible abuso de poder.

El plan que Marcia armó con su equipo de trabajo consistía en regresar a México; bueno, solo Marcia regresaría pues Alba e Iñaki eran españoles, así que sería su primera vez en el país mexicano. Tenían la información suficiente como para integrarse en la vida de los Lombardo, así que se aliaron a la empresa de Gaspar Iglesias, uno de los socios inversionistas de Lom-Ent, ¿cómo fue que él aceptó a aliarse? pues se trataba de su media hermana, Helena era la hija del segundo matrimonio de su madre. Entonces, debido a que se aproximaría un nuevo proyecto publicitario, ese fue el momento en el que los tres abogados decidieron comenzar a echar andar su plan.

- Los boletos de avión ya están – la abraza por detrás y comienza a regar besos por todo su hombro – No estas contenta por volver a tu tierra, ¿verdad?

- La verdad no – se gira para darle la cara – ¿te molestaría si hoy no estamos juntos? Estoy muy cansada y mañana viajamos muy temprano.

- Esta bien, no hay problema – sonríe acariciando su mejilla.

Iñaki conocía la historia de Marcia, pero no sabía que el hombre al que iban a investigar, se trataba del mismo que hirió a la pelirroja, de saberlo, no permitiría que ella fuera quien se internara en la empresa para investigarlo directamente.

Quizás eso era lo que tenía inquieta a Marcia.

Según Alba ella no era ni una pizca de la mujer que fue hace diez años; sí, tenía la misma cara, pero los años no habían pasado en balde, como los buenos vinos; sus curvas eran más pronunciadas y el rostro se volvió mucho más afilado, además, el color de su cabello era diferente, lo que le daba un aspecto más atractivo, lo que no era muy lejos de su ser, pues Marcia era una mujer con un sexappeal muy marcado.

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