Amado Y Perseguido ©

9. Una señal

-¿Claire?-la voz de mi hermano Steve venía desde arriba.
-Estoy abajo-le informe. Bajo sin camisa-como de costumbre- sonriendo de oreja a oreja.
-¿Que haces ahí tirada?-me pregunto alegre
-Acabo de llegar. Me escape.-le respondí orgullosa.
-Ya se. Cuando volvió mi abuela, hice una nota rápido diciendo que habíamos salido los dos. Y me escondí en el ático. Me debes una-se sentó a mi lado.
-¿Y donde esta ella ahora?
-Volvió a irse. No se a donde
-Oh que alivio-nos quedamos en silencio.

-¿Sabes cómo puedes pagarme por haberte ayudado?-interrumpió el silencio
-¿Como?-alce una ceja
-Necesito que vayas a comprarme unas gomas de fresa al supermercado-abrí los ojos
-¿Y porque no vas tu?
-Porque las gomas de fresa solo les gusta a las mujeres.
-Pff..tonterias.
-Entonces le diré a mi abuela que no salimos juntos.
-También te va a regañar
-Pero peor te va a ir a ti.
-Mm...¿Tiene que ser en el mercado?
-Si.
-Puedo comprarlo en la tienda en donde trabaja Jerry..
-En el mercado. En la tienda de tu amiguito solo venden las de menta-rodé los ojos.
-Perezoso, arrogante-salí de la casa tomando las llaves del auto. -Hey...¿Como me vas a cubrir?
-No voy a aparecer hasta que llegues. Llámame cuando eso pase y salgo por el patio-me guiño el ojo.
-Agh!-me queje mientras me montaba en el auto.

-Siempre tengo que ser yo la que hace todo ¿no?-me quejaba sola en el carro de camino al supermercado-Oye tu. Si, te hablo a ti señor del cielo. ¿Porque nunca nadie piensa en mi? Owdrie nunca me llama...siempre soy yo. Mi hermano nunca me ayuda a mi...siempre tengo que ser yo. Y Adam tiene novia...¿Para qué dejaste que lo conociera? ¿No puedo tener algo de importancia para la gente que me rodea? Si...tal vez exagero, pero tengo razón. ¿No es así? Te suplico una señal. Una señal de porque no puedo ser tan importante. ¿Si? O solo...porque no puedo ser algo mas para un chico. ¿Porque conocí a Adam? ¡Dame una señal por favor!-algo me hizo detenerme. Un golpe en el capo del carro.

Atropelle a alguien.

Un frío recorrió toda mi columna.

Me baje del auto temblando. Había una chica tirada en el piso. Era rubia, muy rubia. De ojos azules y piel blanca. Se parecía a Felicity pero esta tenía un poco mas de decencia al vestirse.

-¿Estas bien?-pregunte nerviosa.
-Auch...si. Eso creo-se froto la cabeza.
-Lo siento. Perdón perdón.
-No es tu culpa. Pase mientras el semáforo estaba en verde-me informó. Bueno...eso me calmo un poco.
-Voy a llamar a una ambulancia-le informe, antes de sacar mi celular.
-No no. No hay problema.-me fije un momento en la calle. Todo estaba desierto. No había ningún carro o otras personas. Solo estábamos ella y yo.
-¿Puedo entonces llevarte a algún lado?-me ofrecí.
-Si. Si déjame en mi casa por favor
-claro con gusto.

La ayude a levantarse, y la monte en el asiento del copiloto.

Me iba diciendo por donde iba, hasta que llegamos a una casa gris grande.

Ella marcó un numero desesperada.

-Ven te ayudo-le dije. La ayude a bajarse y entrar a su casa.
-Siéntate-me dijo con dulzura.
-No...yo-mire la hora. Una hora atrasada. Iban a matarme.-No puedo tengo que irme.
-Solo un café por favor-esa dulzura me hizo quedarme.
-Esta bien- se levanto con dificultad, y se desapareció al fondo de la casa, pensé que ahí quedaba la cocina.

Tocaron la puerta. Parecía que no escuchaba así que decidí levantarme y abrirla.

-Jesus-exclame.
-¿Que haces aquí?
-Yo...
-Adam-exclamo la rubia llegando a sus brazos.
-Ella es mi novia-me informó Adam antes de que ella lo abrazara.

Ira subió por mi cuerpo.

Pero era el tan dulce, que me sentí mal por maldecirla.

*******

¿Acaso esa era la señal? ¿Conocer a la novia de Adam?

Bueno. Tendré que superar que era muy amable. Y que era perfecta para Adam...

Estaba aún congelada en el mueble, tomándome el café que ella me trajo, mientras los observaba disimuladamente. Me sentía como un bicho raro mientras ellos se abrazaban.

Después le explique todo a Adam. Tuve que decirle que atropelle a su novia, pero el no se molesto en lo absoluto. Ya que lo veía si tenía cierto parecido con la rubia. A pesar de que que no éramos iguales físicamente, se comportaba igual que yo en algunos aspectos.

Se sentaba igual que yo. Y rodaba los ojos igual que yo. Juntábamos las manos igual, y hasta podíamos tener los mismos gestos.

Así que yo misma decidí cambiar esos aspectos iguales que la novia de Adam. No quería parecerme a ella. No quería nada que tuviera que ver con ella, aunque fuera muy dulce o lo que sea.

Y podría decirse que tenía un pensamiento bastante infantil.

Y ese pensamiento...

Era que si el terminaba con su novia, podía irse conmigo porque me parecía a ella.
Como dije, este pensamiento fue uno muy tonto de mi parte y lo deseche. Pero de todas formas iba a cambiar esos aspectos.

Me fui una hora después de que Adam llegara. Era obvio que mi abuela podía estar en la casa, gritándole a mi hermano, y preparando un buen castigo para aplicarme. Pero no...fue todo lo contrario.

Toque la puerta dos o tres veces. Hasta que decidí entrar por el patio.

Estaba todo cerrado, subí la es las en busca de mi hermano.
-¿Porque lloras?-Steve me miro, y limpiando sus lagrimas me quito las llaves del auto que todavía tenía en la mano.
-Vámonos te explico en el camino.
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Siento la tardanza. Voy a publicar otro cap para justificarme estos días.

Isabela