En el Gran Santuario Narukami
Sara: Yae-sama, aquí estoy como prometí. Tenga la seguridad de que vine aquí sola y no le conté a nadie sobre este viaje.
Yae Miko: Sabía que mantendrías tu promesa. Después de todo, estoy segura de que apenas has podido distraerte estos últimos días. ¿Has logrado dormir un poco?
Sara: Estás bastante equivocada. Nunca dudaría de los líderes de mi clan. Entonces, ¿dónde está tu prueba?
Tn: Aquí mismo. -Le entrega los documentos a Sara.-
Yae Miko: Qué maravilloso, todo el mundo está cumpliendo sus promesas hoy. Dáselos a Sara, ella puede examinarlos por sí misma.
Sara: ¿Qué es esto? -Lee el documento- Veo que este documento lleva el sello oficial del jefe del clan Kujou y no parece una falsificación. No entiendo, no hay ni una sola palabra sobre la resistencia, Sangonomiya, o la situación en el frente. ¿Qué pasa con los soldados que dieron su vida en el frente, o las dificultades que soporta la gente? ¿Acaso no merecen ninguna mención? Es un absoluto desprecio por la vida humana. ¿Por qué querrían ocultarlo?
Tn: También está este informe donde está el número de quejas de abuso de autoridad de la Comisión Tenryou hacia personas inocentes durante la caza de visiones. Incluye robos, chantajes, homicidios ocultos, amenazas de muerte y demandas de pensión alimenticia, y claro, abuso de índole sexual de parte de samurais de alto rango.
Sara: No, eso no puede ser cierto. La Comisión Tenryou no...
Tn: ¿Que no recuerdas que tus soldados torturaron a un señor de la tercera edad para sacarle información? ¿Quién dice que no lo hacen a tus espaldas porque estás tan distraída besándoles los pies a tu diosa como para darte cuenta de la situación de Inazuma?
Paimon: No olvides que el jefe del clan Kujou también mantuvo esto en secreto de la Shogun.
Yae Miko: Ahí están las cosas que querías ver, pero que también deseabas no ver. Están aquí ante ti. ¿No planearás hacer la vista gorda con ellos?
Sara: Así que todo lo que he tenido... ¿cómo pudieron...? Esta traición es imperdonable. Takayuki, tienes que dar algunas explicaciones.
-Sara se va corriendo.-
Paimon: ¡Hay que alcanzarla!
Yae Miko: Espera, Viajero, hay algo más que tenemos que discutir. La última vez que entraste al plano de Euthymia, fue frente a la estatua del dios omnipresente, ¿cierto? Debes encontrar una manera de recrear las circunstancias de ese día. Si logras que la Shogun Raiden te "abra su corazón" una vez más ante la estatua del dios omnipresente, tendrás la oportunidad que necesitas.
Tn: Haré mi mejor esfuerzo.
Yae Miko: Espera, llévate esto como regalo de despedida. -Le da a Tn un omamori flotante.-
Tn: ¿Qué es esto?
Yae Miko: Los omamori del Gran Santuario Narukami son realmente muy potentes, así que reservé uno para ti.
Tn: Lo atesoraré.
Yae Miko: Fu, fu, fu. Si te encuentras al final de tu ingenio, sácalo y mira qué sucede. Tal vez sus oraciones sean respondidas y todos sus problemas desaparezcan en un abrir y cerrar de ojos. O si alguna vez piensas en mí durante tu viaje, sácalo. Quién sabe, tal vez termine apareciendo justo frente a ti. Solo ten cuidado. No querrás que aparezca ante ti en un momento inapropiado. -Susurra en un tono pícaro a Tn.-
Paimon: Basta, señora zorro, este no es el momento ni el lugar para burlarse de Tn.
Tn: Tú te burlas de mí todo el tiempo.