Mis ojos siguen fijos en el techo. Había pasado un día desde lo ocurrido con Kiki y no habíamos hablado desde esa noche.
-Las cosas no serán como antes Chiara.
-Vivi, nada a cambiado, recuérdalo, solo fue un juego.
Me remuevo inquieta.
-¿Se había divertido ella?
Me avergüenza darme cuenta que yo no la había tocado, y que de cuatro orgasmos. Suspiro. Maravillosos orgasmos. Ella no recibió ni uno.
-¿Debí devolverle el favor? - mi mente regresaba a la escena y en lo bien que se sintió tener sus endurecidos pezones en mi boca. Me muero el labio y cierro los ojos. Los gemidos de Chiara seguían resonando en mis tímpanos como orquesta musical.
Mi móvil emite una melodía bastante familiar. De inmediato lo tomo de la mesa y suspiro al ver a Chiara sonreír en la foto reflejada en la pantalla.
Inhalo con fuerza.
-Respira, es solo Kiki- acepto la llamada y espero.
-Hola, Vio.
-Hola, kiki.
Sonrío al oírla sonreír y automáticamente me relajo, todo está en orden, o eso me parece.
-Pensé que me llamarías ayer.
-Pensé que lo harías tú.
-Que va, ayer Cris estuvo contigo.
Frunzo el ceño
-Y Pol conmigo.
Por alguna razón la idea de Chiara haciendo algo similar con él me sienta como una patada en el culo, y eso se supone que no debe pasar.
Es solo mi amiga.
-¿Has estado pensando en mí, Vivi?
Mis mejillas enrojecen ¿a que viene esa pregunta?- porque yo he pensado mucho en ti...
-¿Kiki qué...?
-¿Ruslana te dio mi caja de maquillaje?
Pestañeo rápidamente confundida por el cambio de tema. Mi prima Ruslana era tan amiga mía como de Chiara, y había venido a visitarme está mañana.
-Si, esta justo aquí- miró en la mesa el estuche- gracias por prestármelo kiki, esta noche quiero lucir bien para mi cena con Cris.
Esta noche tendré una salida con mi prometido, no por desición propia, mis padres insistían en una cena familiar, y no me quedó de otra que acceder. Por supuesto no le diré eso a ella. Por otro lado, como cantante siempre me gusta lucir bien, y Chiara era sin duda la chica con más cosméticos en toda Menorca.
-¿Qué tal te pareció el labial rosa?
Arqueo una ceja sin entender y acerco el estuche para buscar en color mencionado.
-No lo he usado, ya sabes que uso tonos mas rojos.
-Abrelo, me gustaría que lo usaras para mi
Confundida descanso mi móvil entre el hombro y mi oreja. Abro la tapa del lipstick y me sorprendo.
-¿Qué es esto Oliver?
La oigo reír con cierta picardía.
-Ese pequeño labial es un vibrador para clítoris que sin dudas te va a hacer ver las estrellas- otra risita- lo sé por experiencia. Ahora cierra tus ojos, relájate y abre las piernas para mi.
Jadeo
Permanezco petrificada mirando el labial con pánico. En mi poca experiencia sexual nunca había usado un consolador para satisfacerme.
