Aquel día descubrí algo que no sabía ni se me había pasado por la mente alguna vez: no necesitas una almohada cuando tienes a Eric al lado, es más cómodo y además es agradable perderse en su calor antes de quedarse dormido. Era algo de que internamente odiaba admitir, pero para que miento, fué relajante sentir la calidez de ese abrazo que me ayudó a dormir.
Me desperté varias horas después, cuando ya había oscurecido. Estaba adormilado y tenía un poco de hambre, además de que Eric ya no estaba al lado, pero al querer buscarlo con la mirada me dí cuenta de que la luz de la cocina estaba encendida así que de inmediato supuse que él estaba ahí así que me levanté y fuí a buscarlo.
- Eric...
Por mi voz somnolienta se notaba que recién despertaba, él estaba preparándose un sándwich pero al escuchar mi voz dejó eso de lado para prestarme atención.
- ¿Quieres que prepare uno para ti?
El preguntó usando ese mismo tono cálido y amable, ese tono angelical que logró cautivarme. Le respondí que sí y tomé asiento en una de las sillas que tenía colocadas alrededor de la mesa, mientras él continuaba con la preparación del sándwich.
No tuve que esperar mucho para que estuviera listo, se sentó a mi lado y pudimos disfrutar de la comida juntos, dejamos pasar un rato y luego me regresó a casa prometiendo devolverme mi ropa cuando estuviera lista para usarse nuevamente.
Durante la noche no pude dormir bien, pues pensaba en todos esos escenarios sexuales en los nos había imaginado en el momento en que me pidió quitarme la ropa, además de pensar en lo cerca que estuvimos de besarnos cuando me abrazó y cubrió con la frazada, tanto así que ahora me preguntaba cómo hubiese sido si nos hubiéramos besado y me reprochaba internamente por pensar de esa manera. Incluso en mis sueños podía verlo tocando mi cuerpo desnudo que sólo rogaba por más y dando caricias que me hacían gemir por el placer que estaba experimentando. Gracias a estos sueños y pensamientos desperté con una erección que tuve que atender antes de tomar mi baño de las mañanas.
Era confuso, ¿cómo es que un sólo acercamiento de él y la clase de atenciones que había tenido conmigo eran suficientes para poner mi mundo de cabeza y crearme pensamientos que jamás creí llegar a tener? No lo entendía, hacía muchísimo tiempo que no sentía esto con nadie y poco a poco me había olvidado de cómo se sentía el amor y... Espera... ¿Eso significa que me estoy enamorando de Eric Cartman? Quiero decir... Incluso lo he llamado por su nombre más veces de lo que solía hacer antes y ahora no podía acercarme a él sin sentir los latidos de mi corazón acelerarse. Los viajes y paseos en su moto, las salidas, las risas y conversaciones... Todo eso estaba en mi cabeza y me confundía acerca del tipo de relación que tenía (o internamente deseaba tener) con Eric.
- ¡Hey, judío! - la voz de Eric junto con el repentino contacto físico que tuve con él cuando me abrazó por los hombros me sacó de mis pensamientos - el fin de semana habrá una fiesta en casa del imbécil de Tolkien y posiblemente podremos usar su piscina. ¿Vienes conmigo? Salgamos a divertirnos un rato.
Me la pensé por un momento pero al final acepté, después de todo es nada más una fiesta y nada malo puede pasar... ¿Verdad?
![](https://img.wattpad.com/cover/322001406-288-k232676.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Cupido y judío
Fiksi PenggemarDicen que del odio al amor hay un solo paso pero, ¿eso es cierto? Nuestros protagonistas están por comprobarlo. Eric Cartman se verá obligado a dedicarle gran parte de su tiempo a cierto judío de Jersey que dice odiar gracias a una apuesta hecha co...