CAPÍTULO 2: 'AYÚDAME'

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Alguien más abrió la puerta y salió del salón privado, era el joven maestro que vino a servirse del club y les ordenó que trajeran algo. Mientras varias personas hablaban, Mingwei se dio la vuelta con la idea de irse primero.

Todavía no había ningún mensaje de Cheng Xiaobei en su teléfono, por lo que decidió echar un vistazo en el baño que estaba en este piso.

Los baños estaban separados de las habitaciones privadas del club, generalmente, los invitados que venían a este lugar rara vez iban a los baños públicos, por lo que no resultaba descabellado ni imposible que alguien dejara a otro encerrado en el baño.

Mingwei abrió la puerta del baño y entró.

El hombre que estaba inclinado para lavarse las manos en el lavabo giró la cabeza al escuchar el sonido.

Mingwei fue tomado por sorpresa quedándose inmovil bajo la mirada del oponente, sus piernas eran incapaces de moverse como si estuvieran enraizadas en las plantas de sus pies, sus manos colgando a los costados se volvieron incontrolablemente rígidas y las yemas de sus dedos se curvaron inconscientemente.

Rápidamente bajó la mirada, evitando el contacto visual con el hombre.

Lu Fengzhou miró el uniforme del club que llevaba, se enderezó frente al lavabo, mientras calmadamente decía: __Este es el baño de invitados.

Existía una regla muy estricta en el club de que ningún empleado sin excepción se les permitirá usar los baños designados para los invitados.

No importaba cuán elocuente fuera normalmente Mingwei, frente a Lu Fengzhou, solo se había quedado mudo sin saber que decir, quedándose en silencio durante dos segundos, en tanto, se explicaba con voz entrecortada: __Yo.

Como si no estuviera interesado en su explicación, Lu Fengzhou levantó la mano, para sacar un pañuelo desechable del dispensador, y se secó lentamente las gotas de agua de sus manos.

Mingwei levantó la mirada en silencio, sus ojos se posaron en su perfil ligeramente frío en la luz blanca.

Probablemente, porque lo había estado mirado durante mucho tiempo, las cejas de Lu Fengzhou se movieron levemente, levantó la cabeza como si fuera consciente de ello.

Como si lo hubiera esperado, Mingwei retiró la mirada sin dejar rastro, bajó la mirada, continuando con lo que había dejado sin terminar: __Voy a limpiarlo.

Cuando Lu Fengzhou escuchó esto, su expresión no cambió mucho, pero su tono fue bruscamente cortante: __¿En dónde están tus herramientas de limpieza?

Mingwei quedó atónito por un segundo, luego inmediatamente se dio la vuelta y fue a la sala de herramientas junto con él para buscar un trapeador.

Dos minutos más tarde, Lu Fengzhou salió del baño y lo vio encorvado de espaldas a él, como si aparentemente estuviera fregando con seriedad el pasillo fuera de la puerta.

Había demasiada gente tratando de acercarse a él entre semana, pero la persona frente a él era solo un camarero común y corriente. En lugar de exponer las torpes mentiras de Mingwei, Lu Fengzhou caminó a su alrededor con una expresión indiferente.

Pero Mingwei parecía tener ojos en la espalda, el trapeador en su mano estaba hacia arriba y lo persiguió hasta sus pies, casi golpeando sus zapatos de cuero.

Las cejas de Lu Fengzhou se oscurecieron ligeramente, deteniéndose en el pasillo sin moverse.

Pero Mingwei realmente no lo había visto, se puso de pie con el trapeador en la mano, mirando directamente los ojos oscuros de Lu Fengzhou, que estaban ligeramente fríos.

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