CUANDO ES REAL

CAPÍTULO 70: 'INVITACIÓN'

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La aparición de Rong Lin fue como una señal, provocando que no se sintiera demasiado sorprendido por la llamada de Cheng Xiaobei. Sin apresurarse a devolver la llamada a la otra parte, Mingwei guardó su propio móvil, echó un vistazo al paquete servilletas que había sobre el escritorio y, naturalmente, alargó la mano para cogerla. El escritorio frente a él era grande y amplio, y la caja de servilletas estaba colocada en el medio de la mesa. Incluso si Mingwei estiraba sus dedos, aun así, tampoco podía alcanzar las servilletas de la caja.

Lu Fengzhou estaba sentado detrás del escritorio revisando documentos, sin la menor intención de ayudarle. Mingwei se volvió hacia la parte trasera del escritorio, deteniéndose en un lugar no muy lejos de Lu Fengzhou. Una de sus manos se apoyó suavemente en el borde de la mesa, mientras que la otra volvió a acercarse a la caja de servilletas. Cuando las yemas de sus dedos estaban a punto de tocar la servilleta, de repente su muñeca fue fríamente interceptada por Lu Fengzhou desde el aire.

___ ¿Qué haces? ___ Lu Fengzhou preguntó con una cara que era difícil distinguir entre la alegría y la ira.

Con su propia acción de apartar la mano que tenía delante, y percibiendo unos instantes de que el otro estaba haciendo preguntas a sabiendas, Mingwei contestó sin inmutarse: ___ Me iba a limpiar la boca con una servilleta.

Lu Fengzhou no soltó la mano que lo sujetaba, sacando una servilleta limpia de la caja con la otra mano. Sin entender la intención de su movimiento, Mingwei se quedó un poco perplejo en su mente, mientras lo miraba durante largo rato sin decir nada. Lu Fengzhou no vio ninguna fluctuación de emociones en su rostro, mientras le entregaba lenta y metódicamente la servilleta apretada en la punta de los dedos. Tras un momento de vacilación, Mingwei alargó finalmente la mano que tenía apoyada en el borde de la mesa para tomarla.

La mano de la otra parte se detuvo en el aire, retrocediendo bruscamente, Mingwei aún no había reaccionado, su cuerpo siguió inconscientemente sus movimientos, inclinándose ligeramente en su dirección. Un segundo más tarde, Lu Fengzhou reaccionó, la acción de Lu Fengzhou probablemente fue intencional, frunció ligeramente el ceño y la boca, bajó la mano con la intención de retroceder. Lu Fengzhou, sin embargo, se levantó sin previo aviso en ese momento.

Antes de que Mingwei tuviera tiempo para retroceder, la altura de Fengzhou aumentó repentinamente en su campo de visión, el pecho del otro de repente se presionó contra él, sus labios rozaron su barbilla y sus labios, deteniéndose a muy corta distancia de su cara. Su corazón dio un vuelco incontrolable, en tanto, sentía el cálido aliento rociando su rostro. Mingwei giró los hombros aturdidos, presionó las palmas de las manos contra el borde de la mesa y lentamente retrocedió.

Lu Fengzhou de repente levantó la mano tomándolos de los hombros, se cruzó de brazos para sostenerlo en el borde de la mesa, y lo abrazó fuertemente en una postura posesiva, bloqueándolo involuntariamente frente al escritorio, ___ ¿A dónde vas? ¿No ibas a limpiarte la boca con la servilleta?

Habló en un eufemismo tal, pero había un atisbo de peligro y profundidad en su voz. Aunque la otra parte nunca lo mencionó explícitamente, pero de hecho, Mingwei también pudo darse cuenta, que esa noche, en la que Lu Fengzhou le pidió que se fuera, era porque estaba realmente enfadado, y después de conocer la verdad sobre la chaqueta, Lu Fengzhou también parecía haber desarrollado un profundo arrepentimiento, con ganas de que pedirle que regrese. Si Mingwei no hubiera ido a esa gala benéfica antes de que apareciera la chaqueta, probablemente habría estado dispuesto a regresar. Después de haberse tomado la molestia de volver a su país de incógnito, Mingwei no estaba dispuesto a dejar que todos sus esfuerzos se arruinaran por un absurdo malentendido.