Change Of Plans // Adaptación Emiliaco y Leidely Omegaverse

CAP. 28

Todo lo que se hace por amor, se hace más allá del bien y del mal"

- Nietzsche.

Nikolás no dejaba de acomodar su cabello rubio, ahora empezaba a enojarse consigo mismo por habérselo cortado días atrás. Veía su reflejo y acomodaba su traje azul cielo, su camiseta blanca estaba levemente desabrochada y se negó a usar un moño ó corbata, no era lo suyo. Los botines negros que el castaño le regaló unas horas atrás tenían un tacón alto y estaban inseguro de usarlos, pero al momento que sus pies tocaron los botines sintió que estaban sus pies envueltos en una nube, realmente estaban muy cómodos y ahora entendía porqué esa marca era su favorita.

— Niki ya está todo listo. — Joaquín entró a la habitación de su amigo, con una sonrisa al verlo frente al espejo, acomodar su saco nervioso.

Nikolás se negó a que alguien más entrara mientras él se arreglaba en su antigua habitación, en la casa de sus padres, dónde creció y tiene muchos recuerdos de su infancia y adolescencia. El omega se había maquillado levemente, sólo necesitó darle color a sus labios y un poco de brillos a sus ojos verdes. — Te ves muy bien Niki, tu padre vendrá a buscarte en 5 minutos. — sonrió tomándolo de las manos para después abrazarlo, se veía tan feliz y era lo único que importaba.

Antes de que su amigo el castaño saliera de la habitación lo detuvo, necesitaba saber si se encontraba bien él. — La noche anterior, en mi despedida de soltero, dijiste que Emilio aceptó venir contigo hoy y también nos prometiste que se lo dirías ayer en su cita...

El castaño negó un poco evitando la mirada de su amigo, — No lo hice Nikolás necesito tiempo, sé que ya se empezó a notar, pero sólo estoy buscando el momento adecuado y quiero...

La puerta se volvió a abrir y se trataba del padre del rubio que sonrió y se disculpó, pero ya era hora de salir, todo estaba listo para la ceremonia.

— Hablaremos de ésto más tarde. — lo señaló alzando una ceja para caminar al lado de su padre, Joaquín se volteó a ver en el espejo su traje negro y su camiseta desabrochada mostrando parte de su pecho, de ésta manera disimulaba que su barriga estaba creciendo.

Todas las personas que habían invitado Eduardo y Nikolás se encontraban ya sentados formando media luna al centro del bosque nevado dividido por dos pasillos con una alfombra roja que terminaba al frente en una pequeña tarima alta que tenía un arco con orquídeas y pequeñas ramas que el mismo omega se encargó de hacer.

— Estás listo pequeño cachorro. — Bobby, el padre del omega rubio, lo abrazó dándole un beso en su frente. — En pocos minutos mi pequeño cachorro se convertirá en todo un omega, pero para mí seguirás siendo el pequeño cachorro que no sabe distinguir el rojo del naranja, él mismo que llegó llorando porque se golpeó con un balón de básquetbol al intentar regresar el balón.

El rubio tenía un leve sonrojo y sus ojos se cristalizaron viendo a su padre. Que siempre fué tan cariñoso, igual ó más que su madre, siempre mimando y haciéndole entender que él es perfecto y bello tal y cómo es, que tenía que ignorar a esos niños que le decían cosas feas de sus dientes ó de su cuerpo, él es hermoso.

— Te amo mucho papá. — una lágrima resbaló por su mejilla que fué secada por su padre, que al igual que él tenía sus ojos rojos.

— No importa los años que pasen, siempre seguirás siendo mi pequeño cachorro. — sonrió y se acomodó a un lado cuándo se empezó a escuchar una canción que el mismo omega había escrito, ésta era la señal para que saliera.