XVI - Lolo
27 de febrero de 2022 - Granada, España
Una presión en mi pecho no me dejaba respirar tranquila. Me sacudía en la cama para liberarme de este pánico. Sentía un fuego inmenso en mis pulmones y como las lágrimas descendían por mis pómulos. Quería gritar pero nada salía de mi boca. Me dolía el cuerpo y sentía que la cabeza me iba a explotar.
La oscuridad de la habitación me consumía y mi mente no lograba encontrar la claridad.
Pero todo eso se detuvo cuando un fuerte sonido me trajo de nuevo a la realidad. A mi costado sonaba la alarme de mi celular indicando que ya hora de levantarse e ir a trabajar.
Me gire hacia un costado y toqué la pantalla de mi teléfono para apagar ese sonido incesante.
Me aferré a mis sabanas para ser consciente de lugar en el que estaba. Mi cabaña. Mi habitación. Mi cama. Estoy a salvo.
La angustia que había hecho acto de presencia la noche anterior, no me había abandonado en la mañana. Y tenía el leve presentimiento que me acompañaría el resto del día.
Me levanté y sacudí mi cuerpo para liberarme de la pereza. La agustia parecía estar aferrada a mi corazón.
¿Qué estaba pasando?
Tomé mi celular y me dirigí al baño para empezar con mi rutina de cuidado. Repetí cada paso de manera mecánica y automática, no quería darle pie a mi cabeza para que empezara a bombardearme con angustias y preocupaciones.
Con eso listo, me encargué de buscar ropa abrigada para que el frío no me impidiera trabajar. Sobretodo hoy que iríamos al set de Sierra Nevada.
Me colgué mi mochila con todo mi equipo fotográfico dentro y salí con rumbo a la entrada del complejo para esperar pacientemente la tráfic.
El camino lo hice sin compañía, ensimismada en la música que salía de mis auriculares. El ritmo retumbaba en mis oídos y me envolvía en una melodía rítmica que me ayudaba a despertarme y escapar de la realidad aunque sea algunos metros.
Un vez que llegué a la entrada, me senté en el tronco de siempre esperando ver el vehículo blanco al frente mío.
Saqué mi celular de mi bolsillo y revisé mis notificaciones, nada muy interesante. Pero llamó mucho mi atención el hecho de que no hubieran mensajes de parte de mi familia. Desde ayer en la mañana que no sabía nada de ellos. Cuando tuviera un momento libre durante el rodaje, los llamaría.
Pocos minutos pasaron antes de que sintiera el ruido de los frenos de un vehículo. Levanté mi vista y la primera tráfic había llegado.
Miré a mis costados para buscar a alguno de los chicos, o a Bruno o a Bianca. Pero ninguno estaba presente. Todavía era muy temprano.
ESTÁS LEYENDO
TODO FUE PORQUE TE QUIERO - MATÍAS RECALT
RomanceDonde Azul Giordano va en busca de un crecimiento profesional pero se distrae con unos ojitos marrones. Ó... Donde Matías Recalt queda flechado por una chica con flequillo y nariz roja por el frío de la montaña. (matías recalt fanfiction) (matías re...