Capítulo 2

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La pantalla se volvió a encender, mostrando un: 8 años después.

La escena empieza en una habitación, que se encontraba a oscuras, pero poco a poco va tomando luz. Las cortinas que cubren las ventanas se abren poco a poco iluminando a habitación. En el medio de la habitación había una cama con dosel, y en esta se encontraba el cuerpo de una niña, que estaba profundamente dormida.

“¡Buenos días, solecito!  – exclamó una voz en la habitación – Es hora de levantarse.”

– ¿Quién habló? – preguntó Elena confundida al ver que solo estaba la niña dormida.

– Déjame dormir. – responde la chica de la cama.

“Si no te levantas, le diré a Mipsi, que regale la tarta de chocolate que está haciendo para ti. – dijo la voz”

– ¿Se puede saber quien habló? – pregunta Jeremy – No veo a nadie más que a la niña.

– ¿Alguien dijo tarta de chocolate? – dijo la niña sentándose rápidamente en la cama.

– Solo hay que decir “tarta de chocolate” y ella se levanta. – le dijo Blaise a Theo.

– Esa obsesión por la tarta de chocolate o, mejor dicho, por el chocolate en general, es culpa de su madre. – le dijo Anthony a Blaise.

“¿Y solo por eso te levantas? – pregunta incrédula la voz.”

– Sabes que la tarta de chocolate no es un juego, REGUI. – contestó la chica saliendo de la cama para dirigirse hacia el baño – Me iré a bañar, nos vemos en el comedor. – informó para luego cerrar la puerta del baño.

– ¿Regui? – le pregunta Lucius a su esposa, la cual se encoge de hombros al no saber.

La escena cambia y se muestra a la niña vestida con un vestido rojo y dorado, que tenía la imagen de un dragón recorriéndolo. La pequeña se encontraba bajando las escaleras para luego dirigirse hacia el comedor, en donde encontró a su padre sentado en la cabecera de la mesa, desayunando.

– Buenos días, padre lindo. – habló la niña acercándose al mencionado para dejar un beso en su mejilla.

– Buenos días, estrellita. – responde el hombre dejando un beso en la frente de su hija – ¿Dormiste bien? – le pregunta una vez que ella toma asiento a su derecha.

Niklaus observó la pantalla con confusión. Estaba sintiendo un poco de celos y nostalgia al ver la escena de padre e hija, y no sabía por qué tenía esos sentimientos.

– Sí – respondió – pero aún estoy cansada – soltó un suspiro.

– Te entrenaron hasta tarde ¿cierto? – preguntó él con una sonrisa burlona.

– ¿Entrenar? – preguntó Bonnie.

– El tío dice que está en mi sangre ser buena guerrera. – dijo ella para luego tomar un sorbo del jugo del desayuno – Dice que tengo sangre vikinga.

– ¿Sangre vikinga? – cuestionó en un susurro Rebekah mirando a la niña en la pantalla

– Eso lo sabemos, querida. – asiente su padre – Incluso “él” está muy orgulloso de lo buena que eres en batalla.

– ¿Quién es “él”? – cuestionaron algunos alumnos curiosos, pero no obtuvieron respuesta.

– Lo cual es raro, ya que “ya sabes quién” no era su hijo de sangre. – agregó la chica.

– ¿“Ya sabes quién”? – repitió Hermione – ¿Te refieres al que no debe ser nombrado? – dijo con un tono de exigencia.

– Amor, no todo gira alrededor de Voldemort. –respondió Adhara, haciendo que varios se estremecieran al escuchar el nombre.

La hija perdida de Klaus Mikaelson (Watching the movie HPxTOxTVD)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora