Capítulo 9

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– ¿Un poder que competiría con el de su padre? – susurró Freya confundida mirando de Anthony a Adhara – ¿Qué significa eso? – le preguntó a Elijah.

– No sé. – respondió honestamente el hombre – Pero estoy seguro de que Kol lo descubrirá. – dijo mirando al mencionado, observando como los engranajes de su cabeza se movían intentando resolver esa incógnita.

– No puedo creer que el sombrero haya dicho eso. – dijo Adhara – Pensé que esa parte lo había dicho en mi cabeza. – les susurró a sus amigos, esquivando las miradas curiosas de los Mikaelson.

– Para ser sinceros, nadie le prestó atención a esa parte dicha por el sombrero. – reveló Theo – Pero ahora, todos estarán atentos.

Adhara se quitó el sombrero y se lo entregó a McGonagall, para luego dirigirse a su ahora casa.

Más tarde, cuando todos los de primer año están clasificados en sus casas, todos los estudiantes estaban hablando entre ellos. McGonagall golpea una taza.

– Su atención, por favor. – pidió la subdirectora.

– Gracias, Minerva. – le dijo el director a la mujer, para luego voltearse y mirar a todos los alumnos – ¡Bienvenidos! – dijo – ¡Bienvenidos a un año nuevo en Hogwarts! Antes de comenzar nuestro banquete, quiero deciros unas pocas palabras. Y aquí están, ¡Papanatas! ¡Llorones! ¡Baratijas! ¡Pellizco!... ¡Muchas gracias! 

– Está mal de la cabeza. – Damon negó con la cabeza.

Se volvió a sentar. Todos aplaudieron y vitorearon.

Desde la vista aérea del Gran Salón, la comida aparece mágicamente en todas las mesas, y el salón se llena de asombro y charla.

– Vaya. – dijeron sorprendidos los visitantes.

– Eso es genial. – dijo Bonnie – envidio a estos chicos. – dijo mirando la pantalla – A nosotros apenas nos daban almuerzo.

– Y era horrible. – concuerda Jeremy.

– Ese hombre está chiflado. – le dijo Adhara a Blaise.

– No eres la primera que lo dices. – comentó una voz detrás de la chica – Y no serás la última. Soy Adrián Pucey, un gusto en conocerle, majestad.

– El gusto es mío, heredero Pucey. – dijo haciendo una pequeña reverencia con la cabeza – ¿Podrías decirme quien es el profesor que está al lado del profesor Snape? – cuestiona la niña mirando hacia la mesa de los profesores.

– Veo que conoces al profesor Snape. – comentó el chico – Es el profesor Quirrell, enseña defensa contra las artes oscuras. – informa.

– Ya veo. – dijo la chica mirando fijamente al profesor, para luego mirar a Pucey – Y sí, conozco a Snape, ya que fue uno de los mejores amigos de mi padre.

– ¿Le contaste a tu hija que éramos amigos? – cuestión Severus hacia Tony.

– Claro que sí. – confirma el ojiazul – ¿Crees que, porque solo te hayas convertido en un seguidor del viejo loco, tiraría años de amistad?  – preguntó mirando seriamente al profesor de pociones, quien solo pudo sonreír.

– Nunca he visto a Snape sonreír. – murmuró Astoria – Esto es un milagro.

– Señor Campbell, le pediría que se abstenga de insultar al director. – regañó Minerva.

– Anthony no dijo nada que no fuera verdad. – defendió Klaus, ganándose miradas incrédulas y confundidas de su familia y de los habitantes de Mystic Falls.

La hija perdida de Klaus Mikaelson (Watching the movie HPxTOxTVD)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora