CAPITULO 5: HERMOSA LUNA

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Desperté acostada en un sillón, la música se había ido y se encontraban varios a mi alrededor, entren ellos estaba Enid la cual se acerco a mi al verme despertar.

—¿Merlina estas bien? —Pregunto la ojiazul.

—¿Qué paso? me duele la cabeza —Pregunte mientras me sentaba y me llevaba la mano derecha a la cabeza.

—Te desmayaste después de vomitar en Enid —Hablo Ajax riéndose.

—¡Ajax! —Grito Enid dándole un golpe en el hombro a este.

En ese momento me sentí avergonzada puesto que acababa de recordar lo que había pasado, desde que trate de confesarle mis sentimientos a Enid hasta como caí en el suelo después de manchar su ropa con mi vomito. 

—Déjennos solas un momento —Dije para después ver como asentían con la cabeza y se iban dejándonos solas a Enid y a mi.

—¿Cómo estás? —Pregunto Enid sentándose en el sillón.

—Enid... perdón por lo de tu ropa, no se que paso —Hable con pena y bajando la mirada.

—No te preocupes, Yoko me presto una de sus poleras —Dijo poniendo su mano en mi pierna. Levante mi mirada hacia ella y vi como sonreía—. Te traeré una pastilla para tu dolor de cabeza.

Después de una experiencia desagradable esperamos un rato para que a Enid se le bajara el efecto del alcohol para poder llevarla a su casa.
Después de llegar a la mansión Addams me dirigí a mi habitación y me recosté en mi cama mirando el techo, me quedé así por varios minutos. Entonces escuché como dedos se acercó y se recostó a mi lado.

—Fue divertido lo que hiciste en la escuela —Rompí el silencio desviando mi mirada hacia el.

—Supongo que lo merecían.

—Ya no serán una molestia —Aclare y dirigí mi mirada al techo nuevamente.

·𝐍𝐚𝐫𝐫𝐚𝐝𝐨𝐫·

Pasaron los días y todo transcurría normal, en la vida de Merlina nada había cambiado solo se preguntaba si realmente estaba enamorada de la ojiazul, mientras que en la vida de Enid...

—Dedos dime la verdad —Dijo Enid levantándose de su cama.

—No lo sé —Hablo dedos.

—Dedos sabes que entre nosotros no hay secretos.

—Es que realmente no lo sé, si supiera te lo diría.

—Necesito saber que me iba a decir Merlina esa noche —Expreso ella. Se sentó en su cama, poniendo sus manos en su cabeza y agachando la cabeza. Dedos se acercó a ella.

—Puedo averiguarlo.

—No... Yo misma le voy a preguntar está noche, le diré si quiere salir a caminar un rato —Expreso Enid poniéndose de pie.

Enid había hecho la invitación a Merlina ese mismo día en la escuela, a lo que Merlina accedió, se quedaron de ver en un parque cerca del instituto en la noche.

...

La noche había llegado, ambas habían llegado al parque el cual no contaba con total iluminación, solo en ciertos puntos había algunas farolas. Las dos platicaban mientras recorrían caminando el parque.

—Oye Merlina —Hablo Enid bajando su mirada—. Hay algo que te quiero preguntar —Dijo dirigiendo su mirada a la gótica. En ese momento Merlina la miro con los ojos más abiertos de lo normal, se notaba la sorpresa en ella y que comenzó a ponerse nerviosa, parecía que ya sabía lo que Enid le preguntaría.

A la luz de la luna (Wenclair)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora