Deku el Vigilante

Reinicio #13 (5/¿?)

– Kawa – Llamo la voz a la distancia – Despierta Kawa – Invito con un tono inexpresivo.

– Mi cabeza – Aturdido apoyo su palma contra su frente antes de abrir los ojos – ¿Qué paso? – Su tono confundido no tardo más que una fracción de segundo en perder cualquier rastro de expresión.

– Me alegra que despiertes – Agachándose hasta quedar a su altura observo como el silencio formado tras sus palabras se alargaba – Supongo que no recuerdas nada...

– ¡¡Aaaaaaaaah!! – Un incesante grito salió de su boca cuando su mente pudo asimilar lo que había pasado. Cada uno de los pocos recuerdos ocurridos en ese lugar llegó a su mente en forma de una fugaz catarata.

– Entiendo que estés asustado pero tienes que tranquilizarte – Preocupada le extendió la mano esperando que este la recibiera y posteriormente ayudarlo a levantarse, sin embargo la mirada aterrada plasmada en su rostro mientras la miraba indicaba que su esfuerzo por intentar hablar habían sido en vano.

– ¡¡Aléjate de mí!! – Desesperado retrocedió un par de pasos aun sin levantarse del suelo hasta haber ganado una corta pero significativa distancia.

– No tienes por qué temerme no soy tu... – Frustrada contemplo desde su posición como el azabache que hasta hace poco se había arrastrado lejos de ella emprendía una rápida e inútil huida – Enemiga – Frustrada termino su comentario prácticamente dirigido a la nada. Dando un último suspiro con pesadez mientras negaba.

El ruido de cada una de sus pisadas resonaba en ese lugar, paso a paso en un ritmo constante, corriendo tan rápido como sus piernas cansadas se lo permitían. Aligerando el ritmo a medida que su resistencia se agotaba.

Parando en seco apoyo ambas manos en sus rodillas, inhalando y exhalando pesadamente, con su mirada aun puesta en camino que le faltaba por recorrer en ese lugar. No sabía que era exactamente ese lugar, que quería exactamente esa "presencia", que quería, pero tampoco le importaba, lo único que le interesaba era el saber cómo salir.

– ¿Terminaste? – Cuestionó con sarcasmo mientras miraba a una corta distancia. Contemplando inexpresiva como el azabache la miraba inmóvil con una mirada aterrorizada plasmada en su mirada.

– No es posible – Sintiendo como un particular sudor frio recorría su frente su mirada contemplo con incredulidad como esa misma presencia yacía a un par de metros desde su distancia.

– No tienes escapatoria – Avanzando lentamente hasta donde se encontraba su mirada inexpresiva volvió a contemplar algo que se hacía repetitivo.

Esperando pacientemente a que diera un par de pasos reanudo su huida. Haciendo uso de sus energías restantes se alejó con las pocas energías restantes.

– Esto no nos llevara a ningún lado – Negando una vez más cerro sus ojos.

– Esto no es posible – Desesperado su cuerpo callo arrodillado ante lo que su vista miraba. Negando internamente debido a la falta de fuerzas en su cuerpo una mirada vacía fue lo Rey aprecio con cierta preocupación.

– Te tardaste – Acercándose miro como el azabache le dedicaba una mirada vacía tras sus desalentadoras palabras – ¿Podemos hablar?

Inhalando y exhalando grandes bocanadas de aire su cabeza asintió levemente antes de caer al suelo. Incapaz de continuar corriendo se vio resignado a contemplar como la presencia tomaba asiento a una corta distancia.

– No comenzamos de la mejor manera – Recibiendo un débil asentimiento por parte del azabache prosiguió – Sé que tienes muchas dudas y estaré mas que dispuesta a responder todas las que pueda, pero primero me gustaría volver a presentarme. Puedes llamarme Rey, soy la deidad de la desgracia, es un placer – Extendiéndole la mano el azabache imito su acción con timidez, tomando su mano con cuidado, con un toque casi vacilante sin decir algo.