Dangerous love | Steve Rogers

| 1 | Killer Frost

| Lauren |

La luz del día se filtraba por la ventana, lo que me hizo abrir los ojos, pero... ¿Dónde estaba? No parecía mi antigua habitación; todo era diferente y me sentía cansada y muy desorientada. Intenté ponerme de pie, pero alguien entró a la habitación.

- Señorita, veo que ya despertó. Me alegro. ¿Cómo se siente? - dijo una enfermera que estaba de pie frente a la puerta, mirándome fijamente.

- ¿Dónde estoy? - pregunté, sintiendo que nada me resultaba familiar. La situación era muy extraña, y aquella enfermera con su uniforme blanco tan pulcro no me daba buena espina.

- Señorita, tuvo un accidente. ¿Acaso no lo recuerda? - me explicó ella. ¿Accidente? Lo último que recordaba era estar en mi habitación, o como le llamaba yo, aquel cuarto minúsculo en el plantel.

- Lo preguntaré de nuevo. ¿Dónde estoy? - dije, poniéndome de pie.

- Por favor, señorita, vuelva a la cama - me suplicó la enfermera, y pude ver el miedo en su mirada. No pasaron ni cinco segundos cuando la puerta se abrió y entraron dos hombres; parecían guardias, pero su uniforme me dijo que eran algo aún más peligroso.

****

Corría por el pasillo a toda velocidad, buscando desesperadamente una salida. Había creído estar en un hospital, pero estaba equivocada. Al intentar saltar por la ventana, descubrí que todo era un maldito montaje, un escenario para mantenerme atrapada. Me invadieron mil preguntas: ¿Qué me había pasado? ¿Dónde estaba?

Pronto llegué al final del corredor y empujé una puerta con todas mis fuerzas, provocando un estruendo.

- Mierda - solté al ver a todos los agentes en la sala, similar a la recepción de algún edificio.

- ¡Killer Frost ha escapado, repito, Killer Frost ha escapado! - se escuchó por los altavoces.

Varios agentes se lanzaron para atraparme, pero frente a mí había unos grandes ventanales con una puerta de cristal en el centro. Los atravesé y seguí corriendo, llegando a una de las calles principales. Todo era extremadamente diferente: los autos, los edificios, incluso las personas. No sabía hacia dónde ir, solo sabía que debía seguir moviéndome, alejándome de allí.

Una camioneta se detuvo frente a mí, bloqueándome el paso. Intenté rodearla, pero llegó otra camioneta, y otra más. Estaba acorralada.

- Lauren Grey. Veo que ya despertaste - dijo una voz a mis espaldas. Me di la vuelta y vi a un hombre mayor, con un parche en el ojo y una gabardina negra.

- ¿Quién es usted? ¿Dónde estoy? - pregunté asustada.

- Mi nombre es Nick Fury, soy el director de SHIELD - respondió - Y tú, Lauren, estás en Dinamarca... en el año 2010 - añadió. Eso último me dejó helada.

- ¿2010? ¿A qué se refiere? - pregunté confundida.

- Estuviste dormida por 66 años, Lauren. Quería decírtelo lentamente, pero las cosas se salieron de control - explicó Fury.

- Dormida - repetí, observando a mi alrededor. La gente me miraba atentamente; todo era familiar pero extraño al mismo tiempo.

- Sera mejor que vayamos a un lugar más privado, señorita Grey. Le prometo que no le haremos daño - sugirió al ver a la gente amontonándose. No tenía otra opción, necesitaba respuestas y él parecía tenerlas.

- De acuerdo - respondí finalmente, subiendo a una de las camionetas y abandonando el lugar junto a aquel hombre.

****

Había pasado una hora desde que inicie aquel viaje, ciertamente no regresábamos al lugar del que me había escapado recientemente. ¿Qué me había pasado? esa pregunta daba vueltas por mi mente, lo último que recuerdo es a mi huyendo...Y luego.

Llegamos a un complejo, ahí bajé de la camioneta y fui escoltada por dos guardias. Atravesamos la entrada y varios pasillos hasta que llegamos a una sala, había una gran mesa en el centro y estaba rodeada por varias sillas. Me senté en un una de las sillas y esperé. No paso mucho hasta que Nick entrara por la puerta sosteniendo una carpeta en los brazos, pronto distinguí el logo en ella...HYDRA.

- ¿Y bien? - lo mire

- Tú has las preguntas y yo las responderé - hablo

- ¿Qué me paso? - solté. El abrió la carpeta.

- Lauren Grey, fuiste congelada en el 44...1944, hace 66 años, para ser exactos, por agentes de Hydra - respondió. Sin duda esa respuesta me dejo en shock, ¿qué había pasado en todo este tiempo? - Te encontramos apenas hace una semana en uno de los bunkers abandonados que perteneció a Hydra, al parecer un corto circuito en los sistemas del lugar acabo por explotar la zona, eso nos envió una alerta.

- ¿Y la guerra? - me atreví a preguntar lo último que supe fue que seguíamos en guerra cuando todo se volvió negro para mí.

- Termino en el 45, con la caída de Hydra - contesto. Respuesta que me dejo más dudas. - Te preguntare algo Grey ¿Quién eres tú? - pregunto serio.

- Solo fui un experimento más para Hydra - era cierto

- Si eso me queda claro - respondió pasándome aquella carpeta. Había muy pocos documentos, pero eran lo suficiente para responder mis dudas - En más de una vez he visto tu nombre es sus registros, pilas de documentos sobre quién eres y lo que hicieron con el Teseracto y contigo. - Recordaba aquello como si fuera ayer, los experimentos, el Teseracto y la tortura que fue.

Hydra había perdido la financiación y con ella la guerra, miles de seguidores terminaban quitándose la vida. Los bunkers y planteles pertenecientes a hydra habían sido destruidos.

- Te pregunto ahora ¿de qué lado estas Grey? - me miro, esperando respuesta alguna.

- Es más que obvio que no estoy del lado de Hydra, pero tampoco estoy del lado de SHIELD - respondí. Era la verdad, por más que quisiera, no los conocía, la desconfianza es algo que había aprendió hace mucho tiempo - Responderé todas sus preguntas y dudas, pero solo pido una cosa.

- ¿Y cuál es? - pregunto dudoso

- Mi libertad...Pase gran parte de mi vida en Hydra y no fue nada fácil, mi libertad es lo único que quiero.

- Estas de acuerdo conmigo que por tus antecedentes y tus habilidades no puedo garantizar que serás cien por ciento libre, ¿Verdad? - Era cierto, en mi pasado hice muchas cosas de las que no me enorgullezco y se perfectamente que puedo llegar a ser muy peligrosa, pero intentar no cuesta nada; después de todo, no me queda nada.

- Lo se señor, pero si leyó todo mi historial y sobre los experimentos, me ayudaran -

- Te propongo algo Grey. Te ayudamos a que rehagas tu vida, lo mejor que puedas, un lugar cómodo solo para ti. Pero a cambio yo quiero que entrenes - sugirió

- ¿De qué manera? - pregunte. La oferta no estaba mal, pero si aceptaba debía de saber todos los puntos a tratar

- No será un trabajo inmediato, pero si quieres entrar de nuevo en la sociedad necesito que controles esos poderes, no te pido que seas una experta, pero sí que los sepas usar y que puedas vivir cerca de civiles. - respondió - Eres una leyenda señorita y eso es lo que te vuelve peligrosa, necesitas supervisión, pero descuida, no sabrás que estamos ahí.

- Hecho

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No se desesperen que pronto saldrá nuestro querido capitán y nuestros vengadores favoritos.

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¡¡No vemos en el siguiente capitulo!! ¡¡Los quiero!!