| 32 | Fotografías (especial)

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Habían pasado varios minutos desde que Lauren se había ido, Rogers por su parte esperaba pacientemente en el sillón una vez se dio ese tan delicioso baño caliente, el pijama le había quedado bastante bien y era muy acogedor, además mientras esperaba se había tomado otras dos tazas de chocolate caliente, pues aun no se deshacía por completo del frio.

De pronto la puerta se abrió, y ahí estaba Lauren, con nieve en el cabello y suéter, y la nariz roja por el frio.

— He vuelto — soltó una vez adentro casi de inmediato Rogers corrió a ayudarla con las compras y a quitarle la nieve de encima — Descuida se caerá sola

— Lauren estas cubierta de nieve — soltó pasmado — y tienes la nariz roja — añadió tocando levemente la frente de la chica, pero al hacerlo se sorprendió, pues no la sintió fría, sino que estaba lo suficientemente tibia, incluso él estaba más frio que ella — Creí que siempre estabas fría, pero no ¿Cómo es eso posible? — declaró atónito

— Mi cuerpo regula la temperatura de manera diferente, la mayoría de veces estoy fría, como la última vez que me tocaste, pero aun soy una humana y debo de mantener una temperatura adecuada para seguir viva. Cuando las temperaturas exteriores son así de heladas mi cuerpo se calienta solo, el hielo en mi cuerpo forma una capa que impide que el calor salga y lo mantiene dentro, algo así como un efecto invernadero. — explicó mientras se quitaba de encima el abrigo con nieve y lo colgaba en su sitio.

— Vaya, si que eres rara — soltó el soldado ante tan larga explicación

— Gracias, que amable — dijo ella irónica — Compre comida y algunos víveres para los próximos días — declaró entregándole las bolsas de compra. — Puedes empezar si gustas, yo me daré un baño primero, tanta nieve mojo gran parte de mi ropa y no quiero enfermarme

— ¿Puedes enfermarte? — preguntó el soldado sin dejar de mirarla mientras aun sostenía las compras

— Por supuesto Rogers, también soy una persona— soltó con una pequeña risa

— Claro. . . adelante ve, yo acomodare las cosas

.

***

.

| Lauren |

El agua caliente cubriendo mi piel se sentía tan bien, con este clima incluso yo necesitaba un baño caliente. Tan rápido como salí, y después de secarme me puse el pijama, aún tenía el cabello húmedo cuando salí de mi habitación, pero no quería dejar a Rogers solo tanto tiempo, era bastante agradable que estuviera aquí, mas de lo que yo hubiera imaginado.

— Espero que te guste — solté mientras me acercaba al comedor

— Es muy delicioso, gracias — respondió Rogers, sin darme cuenta el ya había acomodado los víveres e incluso me había servido la comida. Revise la jarra del chocolate y me lleve la sorpresa que ya se había acabado. "eran como dos litros de chocolate caliente recién hecho, es decir casi hirviendo" — ¿Aun sigues con frio? — pregunte mirándolo

— Un poco ¿Por qué? — preguntó nervioso

— Porque aun nos quedan dos días aquí y ya se acabaron los dos litros de chocolate caliente Steve — declaré algo divertida. Podía notar a kilómetros que la estaba pasando mal y aun así no se quejaba. De pronto se me ocurrió — Ven aquí — con cuidado, lo tome del rostro con ambas manos, su piel si que estaba fría, active con cuidado mis poderes y trate de absorber el frio de su cuerpo, eso le ayudaría con el clima. — ¿Mejor? — lo mire soltándolo con delicadeza

— Bastante, gracias — respondió, lo note más tranquilo — ¿Qué fue exactamente lo que me hiciste? —  preguntó mientras yo empezaba a comer

Dangerous love | Steve RogersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora