𝐂 𝐇 𝐀 𝐏 𝐓 𝐄 𝐑 𝐗𝐕𝐈𝐈

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"Antes de ti, yo no conocía el amor."

— Estaba solo y triste como esta canción. — Susurraba el peligris lavando los platos mientras los aparatos reproducían aquella canción que era muy personal para TaeHyung.

Desde que vio a JungKook con aquella mujer hablar tan cómodamente, ya no podía verlo directamente a los ojos, se le dificultaba enlazar e incluso continuar una conversación con el azabache. Le parecía absurdo sentirse mal por eso.

Sin embargo, JeonGguk intento que el moreno no se sintiese tan mal, quiso normalizar aquellas emociones tan distorsionadas en el pequeño cuerpo de Kim, pero no lo logro, puesto a que el mayor seguía atacando su mente y su corazón.

— Hyung, ¿haz visto a Holly? — Pregunto el ahora gemelo rubio, que portaba unos lentes de marca en su precioso rostro. TaeHyung sin observar a JeonGguk negó con su cabeza siguiendo con su quehacer.

— ¿Se le perdió a Yoonnie? — Soltó acomodando los platos para luego secar sus manos en una toalla de cocina. Se acerco a Jeon para poder acomodar su corbata que estaba mal puesta. — ¿Hoy es el debate? —

El más alto asintió dejándose mimar por el pequeño TaeHyung, sus manos tocaban su pecho como si fuese frágil. Aquel tacto era simplemente mágico y aunque JeonGguk sabia perfectamente como acomodar su corbata, prefería que el más delgado lo hiciera. JungKook seguía dormido, puesto a que hoy su horario era vespertino, mientras que el de su gemelo era matutino, significaba que hoy después de aquel día, se quedaría solo por primera vez con el Jeon problemático.

— Ten un poco de paciencia con JungKook, ¿si? no ha estado durmiendo bien y esta teniendo problemas con su salud. Si te dice o hace algo, ¿que harás? — Pregunto alzando una ceja mientras tomaba la muñeca de Kim que seguía acomodando la corbata, pero después de esa acción se quedo quieto en su lugar. TaeHyung subió su mirada y trago saliva antes de responder la pregunta del menor.

— Nada. — Contesto no tan convencido pero no era algo que no le gustase, simplemente se sentía culpable de no poder decirles no a ninguno. JeonGguk coloco su mano libre encima del cabello de TaeHyung para alborotarlo y regalarle una sonrisa pura.

— Él no te hará nada, solo es por si acaso, ¿si? — En un movimiento rápido se acerco al rostro ajeno plantándole un beso en sus labios, sin dejar que el otro reaccionase se separo buscando su maletín. — Ah, y... Si pasa algo, no vayas con YoonGi hyung. — Al terminar aquella advertencia, endureció su mandíbula haciéndose notar levemente furioso. Se volteo para poder ver por ultima vez a su tutor y decirle lo siguiente. — Recuerda que él esta muy cansado, ayer vino muy noche de sus practicas, será mejor no molestarlo. Nos vemos Tete.—

Él sabia exactamente donde darle a TaeHyung, sabia que si lo manipulaba de esa manera no seria capaz de acercarse a su departamento. No quería ni imaginarlos solos porque sentía como su sangre hervía y un golpe de adrenalina lo invadía. Si JungKook se atrevía a hacerle algo a Kim, no estando presente, solo rogaba por que el moreno no se vaya a refugiar a los brazos de su vecino.

Incluso tuvo una conversación con JungKook la noche anterior, le aclaro que Min ya estaba encima de ellos, qué haría cualquier cosa si los gemelos le tocaran un solo pelo a TaeHyung, debían estar precavidos y evitar problemas, al menos por ahora.

TaeHyung observo como el rubio abandonaba el departamento y no pudo evitar soltar un suspiro retenido. Sus ojos estaban cansados, su piel cada vez era menos morena reemplazándola un color pálido verdoso, siempre solía marearse y ver destellos cuando su presión estaba por los suelos de baja. Camino hasta el mueble apagando el parlante y busco su frasco de vitaminas. Paso su mano por un apartado dónde siempre las ponía pero no toco absolutamente nada cosa que se le hizo extraño. Se inclino hacia el frente bajando su estatura para buscar mejor, sin embargo, sus pastillas estaban al fondo de aquel mueble.

— ¿Como llegaron ahí? — Susurro para si mismo metiendo su torso por aquel hueco, ya que era muy delgado entraba a la perfección. Estiro su brazo tomando el frasco con suma paciencia para evitar que se cayeran al suelo, seria imposible sacarlas de ahí.

— ¿Qué es esto? — Se escucho una segunda voz espantando al moreno, por desgracia el frasco cayó haciéndolo lloriquear internamente.

JungKook estaba sorprendido por aquella posición en la que estaba el de cabellos grisáceos, alzando su bonito culo como si de un durazno redondo se tratase. Kim siguió luchando por alcanzar su maldito frasco, sin ponerle atención a las pisadas que cada vez se escuchaban más cerca de el estante.

Hasta que sintió unas manos rodear su cadera y empujarlo hacía más fondo de el mueble. TaeHyung se quedo helado en su mismo lugar sintiendo una capa de sudor bajar por su frente. No quería hablar, tenia miedo que cualquier cosa que dijera, el de pelo largo se lo tomara a mal. Estaba sumergido en sus pensamientos de si hablar o no, cuando se escucho un manotazo, directo a sus nalgas, que por cierto, aun llegaba su pijama, un pants sumamente delgado color piel que trasparentaba todo, al menos en esa posición.

— J-JungKook... — Fue lo único que pudo soltar para luego hacerse hacía atrás, pero el menor bloqueo su salida con su pelvis, rozando su entrepierna entre las nalgas de Kim.

TaeHyung sintió claramente como algo duro lo golpeaba en medio de sus glúteo inferior. Saco una mano para poder apartar las de JungKook de su cuerpo pero el azabache fue más rápido tomando esta y doblándola con cuidado en su espalda.

— Me estás asustando, JungKook. — Lucho por no tartamudear en el intento para intimidar al contrario, pero solo sintió como siguió presionando su miembro contra él.

— ¿JungKook? ¿Ya no es JungKookie? ¿Ah? — Restregó su entrepierna por encima del pants ajeno, excitando ambos cuerpos que yacían calientes y no precisamente por el clima. — Vine a desayunar pero no sabía que ya estaba servida mi comida. — Se burlo masajeando una nalga del mayor con su mano libre.

TaeHyung en este punto se sentía humillado, quizás no sabía como responder o como manejar esa situación, pues ninguno de los dos hermanos antes lo había tocado de esa manera, los pocos roces íntimos que había tenido, siempre fueron con el gemelo mayor, pero aquella escena ya estaba siendo muy fuerte y él no sabía como llevar eso, no sabia porque su cuerpo accedía a aquellas caricias como si fuese algo normal, tal vez solo era un niño descubriendo nuevas sensaciones que de alguna manera le aterraban. No quería aceptar que él también se moría por los gemelos, tal vez no de una manera heroica si no erótica.

— ¿Por qué no me quieres hablar ni ver a los ojos? ¿Eh? — Soltó otra nalgada con fuerza haciendo gemir al pobre chico que se encontraba sometido solo por buscar sus pastillas.

— Y-Yo... No.. No sé de que hablas. — Claro que lo sabía, pero no lo iba a confesar, era un secreto solo de JeonGguk y él. No iba a aceptar que se sintió celoso y amenazado por aquella mujer. — JungKook por favor... — Suplico intentando soltar su brazo preso, pero fue inutil.

— ¿Por? ¿No estas cómodo así? Yo si, estoy disfrutando lo que no he podido estos días, porque cierto hombrecito no quiere confesar que...

— ¡Jeon, cállate! — Grito por primera vez, empujando su cuerpo hacía atrás con impulso, saliendo de aquel mueble pero cayendo encima de las piernas de JungKook. Cuando vio que había salido intento levantarse para irse pero la mano de el menor lo impidió, jalando su cuerpo para que se sentase nuevamente encima.

— ¿Me acabas de callar? ¿Qué te estas creyendo? — Apretó su agarre mientras con su mano libre buscaba el mentón ajeno, una vez que lo encontró lo giro levemente sin dañarlo. — Creo que tu religión te abandono. — Dijo con un tono sarcástico antes de besarlo, un beso que no fue correspondido en lo absoluto. TaeHyung lo empujo levantándose y observando a JungKook en el suelo, este tenía una sonrisa cínica en su rostro.

— No me vas a volver a tocar hasta que te alejes de esa mujer. — Dijo para luego irse de la cocina, no había escuchado sus propias palabras, no estaba consciente de lo que había dicho, ¿en serio había caído en la manipulación de los gemelos?

JungKook se quedo pensando con una enorme sonrisa de oreja a oreja, se levanto amarrando su cabellera negra para luego salir de la cocina para seguir molestando a su querido hyung.


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hola, como estan, les ame, nos vemos, voten y síganme adiós 😏😏

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⏰ Última actualización: Feb 07 ⏰

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