VI

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Eran las siete de la tarde, estaba agobiada, la sensación de perfeccionismo no dejaba de atormentar mis pensamientos ¿Y si hago mal el trabajo?, no dejaba de hacerme esa pregunta en mi cabeza. Tenia que estar en media hora en la recepción de los departamentos para ir al set y empezar mi trabajo de fotografía.

Decidí ponerme cómoda, estar tranquila, asique me tomé una ducha, agarré mi altavoz y me metí en la ducha. Cantaba mientras las gotas de agua caliente resbalaban sobre mi cuerpo, Artic Monkeys resonaba por todo el baño a un volumen considerablemente alto, resonó por toda la habitación mi voz cantando una de mis canciones favoritas I wanna be yours.

-- Maybe i just wanna be yours  --Canté alto--

Al salir de la ducha, descubrí que dejé mi ropa fuera y que no tenia sudaderas limpias, ya que me lleve pocas porque mi estancia aquí iba a ser en teoría muy corta. Decidí salir de la habitación e ir rápido a la de Mati para robarle una pero al abrir la puerta me encontré con algo que no esperaba ver.

--¿Enzo? --Pregunte al ver que estaba apoyado en mi puerta y casi se desploma en el suelo al abrirla -- ¿Qué haces ahí?

El me repasó con la mirada de arriba abajo, me observé a mi misma y me di cuenta de que solo llevaba la toalla de ducha la cual solo me llegaba hasta los muslos. Después de repasarme varias veces me miró a los ojos con una pequeña sonrisa.

--Te escuchaba cantar --Dijo indiferente--

--¿Me espiabas? --Apreté el agarré de mi toalla para que no hubiera accidentes--

--No --Soltó una risa-- Te escuchaba cantar, se te oye desde mi habitación y quise escucharlo desde más cerca.

Necesito la sinceridad de este hombre, ¿Cómo podía confesar algo así y mostrarse tan indiferente?

--¿Y lo dices así de tranquilo? --Le miré incrédula--

--¿Porqué sales en toalla? Morirás de frio --Esquivó mi pregunta con otra--

-No tengo sudaderas e iba a por una de Mati.

--El se fue, te puedo prestar una --Me miró con esos ojos rasgados que tenia--

--¿Estas seguro? --El asintió y se encogió de hombros-- Bien, déjamela en el salón --Seguido cerré la puerta y pude escuchar una risa por su parte y sus pasos alejándose de mi habitación--

Me encerré en mi cuarto y me puse a pensar que había pasado ¿Enzo me va a dejar una sudadera? Eso es algo, no se ¿Personal? No entiendo como le puede dar todo tan igual

Dejé de pensar y procedí a ponerme mi ropa, me puse mi ropa interior y unos pantalones vaqueros anchos, debajo de ellos llevaba unas mallas térmicas, íbamos a la montaña, tenia que ir abrigada, arriba me puse una camiseta térmica ajustada que se amoldaba muy bien a mi cuerpo ya que era muy apretada, me puse mis botas para la montaña y salí de la habitación con mi bolo y la cámara.

Al entrar en el salón, estaba Enzo, al parecer esperándome y una sudadera azul oscuro perfectamente doblada a su lado. Me observó y se levantó del sitio.

--Termina de vestirte y vamos --Me ordenó y yo solo me puse su sudadera--

Dios mío, olía muchísimo a el, especialmente a perfume de hombre, no sabia si lo había echo a propósito, lo dudaba, termine de ahuecármela y agarré mi bufanda junto a mis orejeras, agarré mi abrigo térmico y me dirigí a la puerta, no sin antes despedirme de Zara.

Enzo cerró la puerta del piso y yo avancé hasta el ascensor con la esperanza de perderlo por el camino, pero se adelantó más de lo que esperaba y me alcanzó justo cuando la puerta se estaba por cerrar.

𝓣𝓻𝓾𝓮 𝓛𝓸𝓿𝓮- 𝓔𝓷𝔃𝓸 𝓥𝓸𝓰𝓻𝓲𝓷𝓬𝓲𝓬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora